

Europa es un reservorio de antigüedades y recuerdos de grandes civilizaciones pasadas, como la griega y la romana. Existen ciertos países que, a diferencia de Italia, Francia o España, no tienen ruinas tan visibles, por lo que solo de vez en cuando se desentierran tesoros milenarios.
Este fue el caso de equipo de arqueólogos que halló en las inmediaciones del río Sava, en Bosnia, un conjunto de lingotes fabricados durante la Edad de Hierro. Este tesoro se mantuvo oculto bajo el curso del agua por más de 2000 años, y su hallazgo marca un antes y un después para la trayectoria del país.
Según los expertos, es el mayor descubrimiento de este tipo en la historia del país europeo, y podría ser un indicio para revelar qué sucedió con las poblaciones cercanas al río en el inicio de la era moderna. A su vez, el valor histórico de estas piezas de metal podría ser muy alto, lo que significaría más presupuesto para futuras investigaciones de este estilo.

El hallazgo de un hombre aficionado a la historia que modifica la concepción de las civilizaciones antiguas
Los expertos del museo emprendieron la expedición cerca del río Sava debido a la alerta de un aficionado. Pedro Matki, un apasionado por la historia de Posavin, visibilizó distintas piezas y objetos que podían tener un valor histórico y no dudó en contactar a la institución.
Matki vio algo inusual en las aguas turbias del Sava, y sin comprender que era tomó algunas fotos que más tarde envió al museo municipal. "Él fue quien reconoció que se trataba de algo realmente especial", comunicaron. De allí fue contactado con algunos arqueólogos submarinos y cuando el nivel del río bajó lo suficiente para poder bucear tranquilos, llevaron a cabo el trabajo de rastreo.

El valor real de las piezas de metal encontradas por los arqueólogos
Los investigadores del Museo del Monasterio Franciscano de Tolisa fueron quienes llevaron a cabo el hallazgo. Ellos mencionan que son lingotes bipiramidales, es decir, barras, placas o bloques de metal que generalmente eran aptas para su transporte y posterior procesamiento. Los herreros luego fundían estas piezas para crear herramientas y armas.
Por las formas y los sutiles detalles que tienen las piezas, los expertos fueron capaces de determinar en qué época se forjaron. Estas últimas tienen su origen en la transición de la Edad de La Tène (450 a.C.) al periodo romano y se datan en los siglos I o II a.C.
Según informan las autoridades del museo en su página de Facebook, el hallazgo de los lingotes de Bosnia es el más importante de este tipo, ya que "en Croacia se guarda solo uno, y en Eslovenia, dos o tres". A su vez, explican que "cantidades mayores se han encontrado en Francia, Alemania, Hungría y Rumanía".

La relevancia histórica del descubrimiento
El siguiente paso es llevar a cabo un análisis químico de los lingotes y con ello se espera que pueda determinarse desde la mina de origen del metal, hasta la confirmación de rutas comerciales que conectaban la Posavina del lado bosnio con Europa central, antes de Cristo.
Este trabajo podría modificar la concepción de la historia de estos territorios. Según explican los expertos, aquella región de los Balcanes pudo ser preponderante en el comercio con el resto de Europa, Medio Oriente y el Norte de África, algo que hasta ahora había sido desestimado. La principal hipótesis se debe a la riqueza de recursos que guarda ese suelo.
Los científicos y arqueólogos implicados en el estudio de las barras de metal abren la posibilidad para que otros expertos de la zona se sumen a la investigación. Países como Alemania, Francia y Austria podrían ser esenciales para alcanzar nuevos descubrimientos, ya que se trata de una labor costosa que requiere de insumos específicos.
















