La violencia en la campaña política previa a las PASO en Jujuy dio aparentemente un salto esta madrugada cuando un joven radical fue baleado por la espalda en la ciudad de San Pedro, a 60 kilómetros de San Salvador, en un hecho que el radicalismo no dudó en atribuir al Movimiento Tupac Amarú, que dirige la militante kirchnerista Milagro Sala, precandidata a diputada del Parlasur en la lista del Frente Para la Victoria.

El hecho ocurrió en los primeros minutos del sábado, cuando Jorge Velázquez, de 22 años, ingresaba a su casa del barrio Juan Pablo II de la ciudad de San Pedro, una zona escasamente iluminada, y recibió un disparo –aparentemente calibre .22- por la espalda.

El militante de la Juventud Radical quedó internado en la terapia intensiva del hospital Pablo Soria de la capital jujeña. La bala le perforó un riñón, estómago, hígado y vaso, y quedó alojada en la axila. Por la herida, los médicos debieron extirparle el vaso. La denuncia por el ataque fue radicada en la policía provincial.

“Durante la tarde de ayer, mientras Velazquez y otras chicas y muchachos, todos con camisetas identificadoras de la JR, repartían boletas por el barrio Juan Pablo II de San Pedro, fueron amedrentados por gente de la Tupac, quienes les exigían que abandonaran la zona por ser ‘su barrio’ como decían”, apuntó Morales en declaraciones a la prensa.

El senador denunció a la Tupac Amarú y a Sala como promotores del ataque y apuntó: “Jorge volvió a su casa solo y fue baleado por la espalda a la medianoche, lo que es absolutamente inadmisible”.

“La semana pasada, Cristina Peralta, también de la UCR, fue agredida y el frente de su casa empapelado con afiches de Daniel Scioli. Días antes, el militante Chato Farfan también fue amedrentado. En Ledesma, nuestro candidato a intendente, Oscar Jayat, y su familia fueron víctimas de gas pimienta y terminaron internados. En El Carmen, el auditor general de la Nación, Alejandro Nieva, fue apedreado; carteles y pasacalles aparecieron quemados y rotos, entre otros casos muestran un nivel de violencia inaudito”, enumeró Morales.

El dirigente, que ya había advertido al juez federal Cardozo sobre el clima intimidatorio en que se llevaba adelante la campaña, pidió a la Justicia “que arbitre los medios y se garanticen mañana los comicios en paz, tanto mientras funcionan las mesas como al momento del recuento y traslado de las urnas”.

Ante un pedido de la UCR, el ministro de Justicia de la Nación, Julio Alak, prometió un refuerzo de Gendarmería Nacional en la Provincia.