Las empresas representadas por la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC), la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Industria Metalúrgica Argentina (CAMIMA) y la Federación de Cámaras Industriales de Artefactos para el Hogar de la República Argentina (FEDEHOGAR) reclamaron hoy al Gobierno "contar con las garantías necesarias para poder negociar" la paritaria del sector en el medio del plan nacional de lucha de la UOM.
Las entidades empresariales hicieron, además, un llamado al Ministerio de Trabajo para que "intervenga y proporcione el marco adecuado que permita una negociación justa y con paz social, a fin de seguir generando valor agregado para el país", dijeron en un comunicado en el que recordaron también el pedido formulado a la cartera laboral para que dicte la Conciliación Obligatoria.
"El ministerio no ha dado respuesta, teniendo toda la responsabilidad sobre la evolución de los hechos durante las próximas horas ya que las medidas de fuerza mencionadas dieron comienzo antes de cumplirse con todas las etapas establecidas en la normativa", cuestionan las patronales metalúrgicas.
La UOM, por su parte, acusó a las cámaras de no haber realizado ofrecimientos serios, pero desde el sector empresarial aseguran haber mostrado "total voluntad para llegar a un acuerdo que permita mantener el poder adquisitivo de los salarios metalúrgicos". No obstante, las empresas señalan "la dificultad para llegar a un acuerdo acentuada por el pedido de aumento salarial desproporcionado por parte de la UOM, que se aleja de los indicadores técnicos basados en la evolución de la inflación medida por el INDEC y las proyecciones del BCRA".
Según las empresas "en la última negociación anual, los salarios metalúrgicos experimentaron aumentos por encima de la inflación".
La disputa entre las empresas metalúrgicas y la UOM se enmarca en una serie de acciones escalonadas llevadas a cabo por el gremio, que incluyeron una marcha hacia las oficinas de Techint.
La UOM insiste en su objetivo de lograr una recuperación y recomposición del salario "justo y digno para los trabajadores metalúrgicos", argumentando que "el poder adquisitivo de los salarios ha disminuido significativamente durante los últimos años, a pesar de la recuperación de la producción y el uso de la capacidad instalada en el sector".
Lo que se discute es el próximo tramo paritario para el trimestre julio-agosto-septiembre, según lo acordado en abril pasado para el segundo trimestre de 2023, al comienzo del año paritario de la UOM 2023/2024 que no coincide con el calendario. Entonces, se selló una suba del 18,8%.
El nuevo pedido del gremio busca recuperar los puntos del acuerdo que se perdieron con la evolución de la inflación. El acumulado abril-junio es del 22,2% con lo cual el acuerdo original quedó unos cuatro puntos por debajo de la evolución del costo de vida durante este período, observa el gremio.
La UOM pretende empardar de forma retroactiva ese desfasaje entre lo firmado en abril y la inflación acumulada en los tres meses siguientes, con una suba acumulativa del 10% al 1 de junio. Y sellar un aumento del 30% para el segundo tramo del año paritario, a lo que se pretende sumar el adicional por zona desfavorable. Remarcan que el 40% es innegociable, y ofrecen como alternativa que se pague todo junto o en tramos acumulativos.
No obstante, el punto que genera mayor fricción es el pedido de un bono de $60.000 como reconocimiento por el Día del Trabajador y la Trabajadora Metalúrgica, el 7 de septiembre. También aquí desde el gremio se muestran dispuestos a conversar un pago en cuotas, ese es su límite hoy.