El precandidato presidencial del PRO, Mauricio Macri, dio por terminada toda posibilidad de un acuerdo en las PASO con el Frente Renovador y dijo que si Sergio Massa lo llamara ofreciéndole su postulación a gobernador “le diría que no”, mientras que la dirigencia macrista reaccionó con indiferencia al gesto de Francisco De Narváez de retirar su candidatura bonaerense para facilitar un acercamiento.

Esta tarde, en el Consejo Nacional del PRO que se reunió en Mar del Plata, Macri reiteró ante sus dirigentes “la necesidad del cambio” y dijo que lo tiene “cansado” el asunto de un posible acuerdo con el massismo.

Allí, tras conocerse la noticia de De Narváez dando un paso al costado para favorecer “la unidad opositora”, el secretario general del gobierno porteño y estratega del PRO, Marcos Peña -férreo opositor a un acercamiento con el PJ-, dijo a los presentes en la reunión que tuvo lugar en Torres de Manantiales: “Estas presiones muestran que estamos en el camino correcto”.

A su turno, el publicista asesor de Macri, Jaime Durán Barba, expuso en el cónclave sobre cómo está organizando el voluntariado (llegaron a más de 400.000 inscriptos a nivel nacional) y defendió la política de alianzas.

“‘No vamos a presentar ninguna alianza con Massa”, enfatizó Macri y, al ser consultado sobre su respuesta en caso de que el líder del Frente Renovador lo llamara y le propusiera ser su candidato a gobernador, respondió: “Le digo que no, mi candidata en la provincia de Buenos Aires es María Eugenia Vidal”.

En declaraciones radiales, el líder del PRO subrayó que “si hay un lugar donde el peronismo ha gobernado durante 30 años es la provincia de Buenos Aires y no puede ser que haya gente sin cloacas, con la plata que ha entrado a la Argentina”.