Días después que el Gobierno comprometiera el apoyo de las cámaras empresarias, gremios y movimientos sociales para encarar las negociaciones con los acreedores del país, Alberto Fernández se anotó el apoyo de la Iglesia a las conversaciones que apuntan a conseguir un plazo más largo para hacer frente a los compromisos de deuda externa.
La Comisión Episcopal de Pastoral Social, el órgano que expresa el sentir de la jerarquía católica en asuntos de interés público, emitió un comunicado que recoge varias de las ideas con las que el Gobierno se ha expresado al respecto del déficit de las cuentas públicas, a la vez que responsabilizó a la administración del ex presidente Mauricio Macri por el deterioro de la calidad de vida de muchos argentinos sumidos en la pobreza.
"Al abordar el tema de la deuda externa, deseamos que nuestra Patria se asuma como protagonista de su propia suerte para definir el propio desarrollo cultural, civil, social y económico, de modo de poder construir y afianzar un modelo que tenga como eje central la producción y el trabajo", expresó el cuerpo que preside el obispo de Lomas de Zamora, Jorge Lugones, jesuita como el papa Francisco, hermano del presidente del PJ de La Plata, Luis Lugones, y tío del ex intendente de la capital bonaerense, Pablo Bruera.
"En la Patria se presenta hoy el renovado desafío de atender la deuda pública pero, sobretodo, las deudas sociales que nacen de un orden económico que ha privilegiado la especulación financiera por encima de la producción y el trabajo digno".
La Pastoral Social resaltó que “el servicio de la deuda no puede ser satisfecho al precio de una asfixia de la economía de un país", y añadió: "Vuelve a plantearse en nuestro país el dilema de pagar sobre el hambre y la miseria de millones de compatriotas o buscar un camino que, sin dejar de honrar las deudas, anteponga el crecimiento de la economía, el equilibrio de las cuentas públicas y la atención de los más necesitados".
En un párrafo encriptado, el órgano eclesial también responsabilizó a la gestión de Cambiemos por la debacle social, al subrayar que "en la Patria se presenta hoy el renovado desafío de atender la deuda pública pero, sobretodo, las deudas sociales que nacen de un orden económico que ha privilegiado la especulación financiera por encima de la producción y el trabajo digno".
También veladamente, la Iglesia buscó no alinearse automáticamente con la actual gestión, con la que hay posturas enfrentadas por el aborto. La Pastoral llamó a "corregir los modelos de crecimiento que son incapaces de garantizar el respeto del medioambiente, la acogida de la vida, el cuidado de la familia, la equidad social, la dignidad de los trabajadores y los derechos de las generaciones futuras".
El comunicado