En medio de la polémica que impulsó el kirchnerismo por su idoneidad y salud, el juez de la Corte Suprema Carlos Fayt salió hoy de su casa rumbo al alto tribunal, en medio de un fuerte operativo de salud.

“Estoy bien voy a Tribunales”, dijo en un breve contacto con la prensa antes de subir a la camioneta acompañado por su secretaria.

El auto de Fayt fue rodeado de un cordón de seguridad de al menos 6 policías y su camioneta fue subida a la vereda para facilitar el acceso del magistrado a la misma.

El Gobierno y distintos voceros kirchneristas pusieron a la salud de Fayt, de 97 años, en el ojo de la polémica. En el Congreso, el oficialismo aprobó investigar si el más longevo juez de la Corte Suprema se encuentra en condiciones físicas para seguir desarrollando su rol.

Ayer, la comisión de Juicio Político de Diputados determinó iniciar un proceso para establecer las capacidades del juez.