El déficit primario fiscal de la Administración Pública Nacional (APN) fue en agosto de $ 145.094 millones y en el acumulado de los primeros ocho meses del año de 2.572.856 millones de pesos ($ 2,5 billones), y en ambos casos registró una reducción real en la comparación interanual del 54,3% y del 26%, respectivamente. El déficit primario ya estaría en el orden del 1,5% del Producto Interno Bruto (PIB), cerca de la meta de 1,9% del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

La información fue dada a conocer por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), y revela que los ingresos totales del mes pasado -$ 2.717.844 millones- tuvieron un incremento nominal del 149,3% y real -deducida la inflación- del 11,1%.

Los gastos totales en agosto ascendieron a $ 3.183.545 millones, con un aumento interanual nominal del 127,8% y real del 1,5%, en tanto los primarios -que no incluyen los intereses de la deuda- fueron de $ 2.862.939 millones, con subas del 132,4% y 3,6%, respectivamente.

La diferencia entre los gastos totales y primarios se debió al pago de intereses por $ 320.606 millones, con una suba nominal del 93,7% que, al ser inferior a la inflación, representó una caída real del 13,7%.

Como resultado de la evolución de ingresos y gastos, agosto cerró con un déficit financiero de $ 465.700 millones, un 51,6% más que en el mismo mes de 2022, pero un 32,4% menos medido a valores constantes.

En cuanto al resultado primario, el déficit fue de $ 145.094 millones, apenas un 2,4% más que en agosto del año pasado en términos nominales, con una caída real del 54,3%.