

La Comisión Séptima del Senado de Colombia aprobó con ocho votos a favor y cinco en contra la ponencia de archivo de la Reforma a la Salud 2.0, radicada por el congresista Alirio Barrera, del Centro Democrático.
Esta decisión retrasa nuevamente las iniciativas del Gobierno nacional para modificar el sistema de salud.
El proyecto había llegado a su tercer debate obligatorio y enfrentaba meses de paralización en la comisión. Dos ponencias competían entre sí: una por el archivo y otra impulsada por la senadora Norma Hurtado como alternativa.
Apoyo y oposición en la Comisión Séptima
Encabezando la tendencia por el cierre del trámite legislativo estuvieron figuras como Miguel Ángel Pinto, presidente de la Comisión, y representantes de partidos como Liberal, Conservador, La U, Mira y Colombia Justa Libres. Estos congresistas argumentaron reservas sobre la viabilidad financiera y técnica de la reforma.
Por otro lado, quienes apoyaban la continuación del proyecto incluyeron a Wilson Arias, Martha Peralta y Ferney Silva (Pacto Histórico), además de Fabián Díaz (Alianza Verde) y Ómar de Jesús Restrepo (Comunes). Defendieron la necesidad de reformar el sistema de salud y critican que el archivo perpetúe la situación actual.
Declaraciones del oficialismo y ministros
El ministro del Interior, Armando Benedetti, calificó la decisión como un movimiento político oportunista y señaló: “Esperaron hasta el último día para hundir la Reforma a la Salud y así no poder revivirla en plenaria como hicimos con la Laboral. Han jugado con la salud de los colombianos de una forma cochina y barata”.
El ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, fue uno de los principales defensores de la iniciativa. Afirmó que la reforma contaba con respaldo técnico y criticó la paralización del proyecto por parte de la comisión, enfatizando que el oficialismo todavía podría apelar la decisión ante la plenaria del Senado.
Argumentos sobre la viabilidad financiera
La discusión sobre la viabilidad fiscal de la reforma fue determinante para la decisión de archivar la iniciativa. La senadora Norma Hurtado señaló que la incapacidad del Ministerio de Hacienda para garantizar estabilidad presupuestaria a una década influyó en la votación.
El Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf) había advertido que el impacto fiscal podría superar lo previsto por el Gobierno, con un aumento del gasto más rápido y desde un punto de partida más alto. Estos informes reforzaron los argumentos de quienes apoyaron el archivo.
Posibles pasos a seguir y apelación
Tras la votación, el senador Fabián Díaz presentó una apelación, lo que obliga a que la plenaria del Senado se pronuncie sobre la validez de la decisión. Si la apelación resulta exitosa, el proyecto podría ser remitido a otra comisión para continuar su trámite.
No obstante, la entrada en receso legislativo limita el avance del proyecto durante los próximos dos meses. El precedente de la reforma laboral sugiere que, aunque archivada en comisión, aún existe la posibilidad de revivirla en plenaria, donde el Gobierno posee mayor respaldo político.











