Tener una alimentación saludable y libre de harinas refinadas es una de las alternativas más famosas. En este contexto, la pizza sin harina ni gluten se consolida como una alternativa ideal para quienes buscan disfrutar de una comida sabrosa, liviana y nutritiva.
Elaborada con vegetales como calabaza y zanahoria, esta versión casera ofrece una textura suave, un sabor naturalmente dulce y un importante aporte de fibra y vitaminas.
Además, esta receta no requiere ingredientes costosos ni procesos complejos, lo que la convierte en una opción práctica para cualquier día de la semana.
Sin harina ni gluten: ¿qué se necesita para hacer la pizza saludable?
A diferencia de las pizzas tradicionales, que tienen harina de trigo y levadura, las versiones vegetales permiten reducir significativamente las calorías y mejorar la digestión.
La base de calabaza y zanahoria combina dos hortalizas ricas en betacarotenos y antioxidantes, aportando beneficios nutricionales sin perder la consistencia necesaria para sostener los ingredientes clásicos de una pizza.
Esta receta también resulta ideal para personas con intolerancia al gluten o que siguen dietas más equilibradas y buscan reemplazar las masas convencionales por opciones naturales y sin procesar.
Ingredientes para la base de calabaza y zanahoria
Para una pizza mediana se necesitan:
- 1 taza de calabaza cocida y triturada
- 1 zanahoria mediana rallada
- 1 huevo
- 3 cucharadas de queso rallado (parmesano o mozzarella)
- Sal, pimienta y orégano a gusto
- 1 cucharadita de aceite de oliva
En el caso de versiones veganas, el huevo puede reemplazarse por una mezcla de semillas de chía o lino hidratadas, lo que mantiene la cohesión de la masa sin usar productos de origen animal.
Paso a paso: cómo preparar la pizza saludable
Los pasos para poder preparar esta receta saludable son los siguientes:
- Precalentar el horno a 200 °C.
- En un bol, mezclar la calabaza cocida, la zanahoria rallada y el huevo.
- Incorporar el queso, los condimentos y el aceite de oliva, integrando hasta formar una mezcla homogénea.
- Extender sobre una bandeja con papel manteca o silicona, formando un disco de aproximadamente 1 cm de espesor.
- Hornear durante 10 a 12 minutos, hasta que los bordes comiencen a dorarse.
- Retirar del horno, añadir salsa de tomate y los toppings elegidos, y volver a hornear entre 8 y 10 minutos más.
