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Las vitaminas son componentes esenciales para el funcionamiento del cuerpo humano, su incorporación se relaciona directamente con la dieta y los macronutrientes ingeridos.
Una de las más importantes es la vitamina B12, ya que tiene múltiples beneficios. También su falta de consumo puede traer varias las consecuencias como cansancio y mareos.
¿Qué es la vitamina B12?
La vitamina B12, que es conocida como cobalamina, forma parte del grupo de las vitaminas B. Este nutriente se puede encontrar principalmente en alimentos de origen animal, como carnes, huevos, pescados y productos lácteos.
Para las personas que tienen dietas veganas o vegetarianas es fundamental asegurar una ingesta asegurada de esta vitamina, para eso es necesario consultar a un profesional especializado en nutrición.
La vitamina B12 juega un papel esencial en el sistema nervioso y el cerebro. También es clave para el correcto funcionamiento de las neuronas y la producción de glóbulos rojos.
La deficiencia de la vitamina B12 se puede manifestar de diversas maneras. Entre los síntomas más frecuentes de deficiencia se encuentran:
Sensación de cansancio
Dificultad para respirar
Latidos acelerados
Mareos
Falta de coordinación

Los alimentos con más vitamina B12
Este componente tan esencial para el cuerpo, se puede encontrar en alimentos de origen animal. Algunos de los más destacados suelen ser los siguientes:
Caballa: 19 mcg por cada 100 gramos
Sardinas: 8.9 mcg por cada 100 gramos
Salmón: 3.2 mcg por cada 100 gramos
Mejillones: 8 mcg por cada 100 gramos
Yema de huevo: 2 mcg por cada 100 gramos
Carne de res: 13 mcg por cada 100 gramos
¿Cuáles son los beneficios de comer pescados?
El pescado y los mariscos son esenciales para dieta equilibrada y saludable, ya que son fuentes excelentes de proteínas de alta calidad. También son bajos en calorías, ricos en nutrientes esenciales y ácidos grasos omega-3.
Incorporar frecuentemente pescados y mariscos en la alimentación puede mejorar la salud cardiovascular y promover un desarrollo adecuado en los niños.
Son esenciales para la reparación de los tejidos, gracias a los ácidos grasos omega-3, y mejoran la salud cardíaca. Además, aportan vitaminas y minerales como el selenio, el zinc y las vitaminas del complejo B.













