La cúrcuma es altamente apreciada por sus propiedades antiinflamatorias, neuroprotectoras y digestivas. Sin embargo, no todas las personas pueden beneficiarse de sus bondades. Existen contraindicaciones que sugieren evitar su consumo en determinadas circunstancias para evitar efectos adversos.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha establecido pautas claras sobre quiénes deberían abstenerse de consumirla. Además, se han identificado diversos efectos secundarios que podrían surgir al ingerir esta especia en grandes cantidades.
Contraindicaciones de la cúrcuma: ¿cuáles son sus efectos adversos?
Según el sitio Medical News Today es crucial estar al tanto de ciertos efectos secundarios potenciales y contraindicaciones de la cúrcuma. ¿Cuáles serían esos efectos secundarios?
- Propensión a quemaduras solares: El consumo de cúrcuma puede aumentar la sensibilidad de la piel a los rayos ultravioletas, lo que incrementa el riesgo de sufrir quemaduras solares.
- Malestares estomacales: La cúrcuma, conocida por sus beneficios para la salud digestiva, puede provocar irritaciones estomacales si se consume en grandes cantidades.
Sus componentes pueden estimular la producción de ácido gástrico, lo que puede ser bueno para algunas personas, pero problemático para otras causando náuseas y vómitos.
Medical News Today concluye que, aunque la cúrcuma tiene muchas bondades, no es adecuada para todos. Por lo tanto, es fundamental que un médico evalúe cada caso y proporcione las recomendaciones adecuadas.
Cúrcuma: ¿qué personas deben evitar consumirla?
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ofrece una serie de recomendaciones sobre quiénes deberían evitar el consumo de cúrcuma y el porqué:
Personas propensas a los cálculos renales: la cúrcuma contiene una alta cantidad de oxalatos que, en grandes cantidades, pueden contribuir a la acumulación de cristales.
Personas con trastornos hemorrágicos: contiene compuestos que pueden interferir en la coagulación.
Pacientes con enfermedades de la vesícula biliar: se recomienda evitar el consumo de cúrcuma debido a sus posibles efectos adversos en estos casos.
Personas con deficiencia de hierro: es importante consumir cúrcuma con moderación, ya que en altas dosis puede dificultar la absorción de hierro.
Mujeres embarazadas o durante la lactancia: no se recomienda el uso de suplementos con alta concentración de curcumina debido a la falta de evidencia científica sobre su seguridad en estos períodos.
