Los pedidos de quiebra aumentaron 11% en 2012 en Brasil, a 1.929, frente a los 1.737 requerimientos de 2011, según datos divulgados este miércoles por la consultora Serasa Experian.
Del total del año pasado, 1086 pedidos surgieron de micro y pequeñas empresas, 530 de firmas medianas y 313 de grandes compañías.
Serasa evaluó que el aumento se enmarca en el ambiente desfavorable para la generación de ingresos y gestión del movimiento de caja de las empresas en 2012. “La baja actividad económica dificultó las ventas, el ambiente externo en crisis no ayudó a las exportaciones, a pesar del real desvalorizado, y la fuerte evolución de la insolvencia del consumidor impactó con fuerza en las cuentas”, dijo la empresa en una nota.
Los pedidos de recuperación judicial tuvieron un crecimiento más expresivo: 47%, de 515 a 757 entre 2011 y el año pasado. Muchas empresas acudieron a la recuperación como estrategia para equilibrar las cuentas. Fue la solución que encontraron para evitar la insolvencia, informó Serasa.
Las quiebras decretadas subieron de 641 a 688 en igual período. Aunque los pedidos de quiebra crecieron en comparación a 2011, frente a 2010, año en que la economía brasileña avanzó 7,5%, se registró una ligera caída. En aquel año, hubo diez requerimientos más –1.939—, de acuerdo con los números de Serasa.
También se decretaron más quiebras en 2010: 732. En 2012, la previsión es que la economía se expanda cerca de 1%, según analistas. En 2011, el crecimiento había sido de 2,7%.
Hubo menos pedidos de recuperación judicial en 2010: 475, ante 757 en 2012.
Los números surgen de un relevamiento mensual de estadísticas de quiebras (requeridas y decretadas) y de las recuperaciones judiciales y extrajudiciales registradas mensualmente en la base de datos de Serasa Experian, provenientes de foros, tribunales de quiebras y boletines oficiales y de la justicia de los estados brasileños.