En esta noticia

Un reciente descubrimiento científico realizado por expertos del ICTA-UAB, el Centro Nacional de Investigación Científica de Francia (CNRS) y la Universidad de Columbia Británica reveló un aspecto completamente desconocido de la historia de los humanos y las ballenas.

De acuerdo con la investigación, las herramientas con huesos de ballena comenzaron a fabricarse hace aproximadamente 20.000 años. Este descubrimiento reafirma el rol crucial de este animal marino para la supervivencia.

"Nuestro estudio revela que los huesos procedían de al menos cinco especies de grandes ballenas, las más antiguas de las cuales datan de hace aproximadamente 19.000-20.000 años. Estos representan algunas de las primeras evidencias conocidas de que los humanos usaron restos de ballenas como herramientas", afirmó Jean- Marc Pétillon, autor principal del estudio.

Herramientas encontradas por los científicos. Fuente: UAB.

El estudio científico que obliga a reescribir la historia

El estudio, publicado en Nature Communications, analizó 83 herramientas de huesos que fueron excavadas en yacimientos del Golfo de Vizcaya en España, así como otros 90 huesos de Santa Catalina.

A través de datación por radiocarbono y la espectrometría de masas, los expertos identificaron cada especie y la edad de las muestras.

"Nuestro estudio revela que los huesos procedían de al menos cinco especies de grandes ballenas, las más antiguas de las cuales datan de hace aproximadamente 19.000-20.000 años", afirmó el autor principal.

Por qué este descubrimiento es importante para la ciencia

Este descubrimiento es una de las evidencias pioneras de que los humanos usaron restos de este animal como herramienta.

Si bien rastrear los inicios de las interacciones entre ballenas y humanos es difícil por los daños causados por el aumento en el nivel del mar, estos sitios arqueológicos permitieron conocer con mayor profundidad la historia del uso de este tipo de herramientas.

Otra novedad de este estudio es que, de acuerdo con los datos químicos extraídos de los huesos, los hábitos alimenticios de las ballenas antiguas no coinciden totalmente con los actuales, por lo que también denota cambios en el comportamiento de estos animales y brinda nuevas perspectivas de su rol en el pasado.