Como toda relación, lo importante no es sólo el comienzo, sino el mantenimiento. Hasta podría decirse que lo más desafiante es lo último. El gobierno de Javier Milei alcanzó su primer acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y ahora tiene por delante el cumplimiento de las metas. Lo fiscal y monetario no será ningún problema: el staff del organismo está plagado de "progres" al lado de la filosofía imperante en el equipo económico. La clave pasa por la acumulación de reservas, y los mecanismos que tiene el Banco Central (BCRA) para sumar divisas.