Es el momento para el negocio de las bicicletas. Un medio de transporte que no para de sumar adeptos, impulsado por el crecimiento de las bicisendas en la ciudad y de empresas que fomentan su uso entre sus empleados. Sin embargo, fabricantes y comerciantes del sector estiman que este año cerrarán con una baja de 30% en las ventas. ¿La causa? Las restricciones a las importaciones están frenando la producción en firmas locales, que requieren piezas que no se fabrican en el país, y la entrada de nuevos modelos.
Es un momento de demanda altísima, pero todo se canaliza en ventas en el exterior. Las restricciones económicas hacen que la gente vaya a comprar afuera, a Uruguay o Chile, o a Estados Unidos. No hay disponibilidad y la gente no se conforma, explicó Claudio Canaglia, presidente de la Cámara Argentina de Comercio e Industria de la Bicicleta (Commbi).
En la Argentina hay unas 20 fábricas de bicicletas y pequeños armadores. Por lo menos el 35% de los componentes de una bicicleta piñón, cadenas, engranajes, frenos debe ser importado. Hace tres años que no entra una cámara. Hay un productor local, pero no puede cubrir todo el mercado. Entrenamos al consumidor para que use la bicicleta y ahora no podemos abastecer la demanda, detalló Canaglia. Las bicicletas de alta gama del exterior arrancan en los $ 10.000. Las locales pueden conseguirse en un promedio de entre $ 1500 y $ 2000.
Es una situación de mucha de incertidumbre en la producción. No podés hacer un plan cuando tenés los permisos de importación (DJAI) parados. En los últimos tres meses la situación se agravó, estamos ya 60 días atrasados con la producción. No es una manía, hay cosas que no se fabrican y ni se harán en la Argentina ni en Latinoamérica porque no hay escala, describió Enrique Españón, titular de la cordobesa Enrique, que fabrica desde hace 40 años bicicletas, unas 35.000 unidades por año. Hicimos todo lo que nos pidió la Secretaría de Comercio. Capitalización; sustitución de importaciones, ahora fabricamos manubrios y caños de asiento de acero; exportaciones por cuenta y orden de terceros y exportaciones directas de nuestras propias bicicletas a Paraguay. Pero nada te garantiza que funcione. La respuesta que nos dan es que no hay dólares para girar al exterior, agregó. En el país se fabrican unas 1,3 millones de bicicletas al año.
El auge de la bicicleta, al menos en Buenos Aires, viene de la mano del crecimiento de las bicisendas y de una política activa que promueve su uso. La red de ciclovías protegidas porteña supera ya los 100 km. y conecta distintos barrios con el centro. En 2007 se hacían 30.000 viajes diarios, en 2012, unos 150.000 y se estima que el crecimiento de 2013 será muy relevante, dijeron desde el Gobierno porteño.
Otra muestra del interés por las bicicletas es que el 2 y 3 de noviembre se realizará la primera Expo Bici en Costa Salguero. El evento reunirá a representantes, fabricantes, distribuidores, comerciantes y fanáticos de las bicicletas. La bicicleta logró posicionarse en la sociedad, primero como un apasionante deporte, pero también como un hábito saludable, un medio de transporte y una forma de colaborar con el medio ambiente, explicaron desde Expo Bici.