Claudio Dowdall dirige La Rural Predio Ferial, el tradicional escenario de las más importantes ferias y congresos que se realizan en Buenos Aires. Atravesó más de 20 meses de un freno en la actividad por la pandemia, que provocó una caída de la facturación de $1000 millones en 2019 a $100 millones el año pasado. Espera un repunte recién en 2024, tras dos años de "fuertes sacrificios".

¿Cómo se vuelve después de tanto tiempo sin actividad?

Fuimos el primer sector que se paró y somos la última industria que está saliendo. El público está ávido de venir al encuentro de la presencialidad y no tiene temores. Por supuesto es prudente y respetuoso de las normas y los protocolos.

¿Pudieron organizar el calendario para eventos postergados y nuevos?

Hay un calendario 2022 muy completo, se están concentrando tres años en uno. Igual no deja de ser un año de transición, que va a ser muy duro. La cadena de valores está rota. Este es un negocio de Pyme, donde hay muchos oficio que se vió muy afectado. Muchas empresas desaparecieron.

¿Qué esperan de 2022?

Viene un año de transición, después un año de estabilidad en 2023 y entendemos -como dicen todos los indicadores mundiales- que 2024 va a ser el año que nivele la actividad y la economía a como era en 2019. La industria venía creciendo. Buenos Aires y Argentina venían instalándose y en búsqueda de escalar en la estadística mundial para ser una ciudad y país de eventos. Ahora hay que hacer lo imposible para que los negocios fluyan en desmedro de las rentabilidades de cada empresa.

¿Cómo manejan los precios en este contexto?

Los eventos se contratan con un año de anticipación. Debemos metros, por eso 2022 será de transición. Hay que pagar aquel metro que tomamos por adelantado. Por otro lado, drásticamente se bajaron costos. Todos ajustamos mucho en abril de 2020, y muy rápido. También se sobrevive por los aportes de capital de los dueños de cada compañía.

¿La facturación entonces cayó considerablemente?

En 2019, facturamos cerca de $ 1000 millones y en 2020, $100 millones. Con esos números está claro que la rentabilidad es negativa y lo mismo sucederá en 2021. Este año vamos a facturar alrededor de $300 millones. Y todo en Argentina, donde la moneda no es constante. Vamos a tener dos años de sacrificio. La Argentina está en un momento de transición y en un proceso electoral, y la incertidumbre en el mercado ferial no es buena.

¿Los congresos mundiales son los más afectados?

Si. Nosotros manejamos también el Centro Convenciones de Punta del Este y como contraste vemos que uno de los problemas que tiene Argentina y que debe solucionar es la conectividad aérea. Debemos recomponerla rápido, porque un congreso mundial le impacta a la Argentina fuerte y a la Ciudad también económicamente.

Un turista de negocios, deja tres cuatro veces más que un turista de esparcimiento. Argentina tiene atributos para posicionarse a nivel mundial y hoy está competitiva en costos. Necesita más conectividad, fronteras abiertas, acelerar ese proceso para que aquellos Congresos que están tomando las decisiones a tres o cuatro años, nos elijan. Hoy, en el Centro de Punta del Este ya tenemos confirmado para el año que viene dos congresos mundiales y en Argentina, ninguno.

"Hoy, en el Centro de Punta del Este ya tenemos confirmado para el año que viene dos congresos mundiales y en Argentina, ninguno", dice Claudio Dowdall, Director General de La Rural Predio Ferial de Buenos Aires

¿Habrá inversiones con ese contexto?

Hay inversiones en asistir a aquellos organizadores que tenían un título y por algún motivo su empresa está afectada. Ayudamos a esas cadenas de valor para que se haga la exposición que planeaban. También en un predio como el nuestro de 12 hectáreas se necesitan inversiones permanentes, tenemos previstas de más de $ 40 millones.