Malek Fara, el CEO de la empresa que vende autos de lujo en el país 'Modena Auto Sport', explicó por qué no logró nacionalizar los vehículos tal como se requiere oficialmente para liberar el pago de impuestos, tras conocerse la decisión del BCRA de incluirla en la lista de las empresas que fueron suspendidas de operar en el mercado de cambio.
La firma es una de las principales concesionarias del país, con marcas de autos premium como Maserati y Ferrari, un negocio que en los últimos meses estuvo beneficiado por la brecha cambiaria que mejoró el valor de los vehículos para algunos argentinos pero que está perjudicado por las trabas oficiales a las importaciones y el mercado cambiario.
"Nosotros recibimos una intimación en octubre y la respondimos rápidamente. Adjuntamos toda la documentación por el ingreso de la mercadería a zona franca La Plata, con todos los despachos, copia de los depósitos y fotos de los autos. La mercadería no ingresó porque no se autorizaron las SIMI (Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones), en cuanto las autoricen estamos para nacionalizarlos en el mismo día", relató a El Cronista.
Detalló además que "desde el momento en que se hace el giro de las divisas hay 90 días para hacer el despacho e ingresar los autos. El giro se hizo y los autos están acá pero aunque me intimen necesito la autorización de la SIMI para nacionalizar la mercadería".
El 28 de diciembre, asegura Fara, la empresa presentó un recurso de amparo que fue recepcionado, para obtener la SIMI necesaria para nacionalizar los autos ya que tenerlos demorados en la zona franca le genera un daño por gastos de almacenamiento sin poder salir a comercializarlos en el mercado.
Hoy Modena posee 37 vehículos en esta situación, que sumaría un aporte al Fisco de alrededor de $ 800 millones para nacionalizar los autos.
Nacionalizar un auto significa pagar los impuestos de importación de alrededor del 200% del valor FOB (de origen). Fara explicó que se debe afrontar un 35% de derechos de importación, 3% de tasa de estadística, 21% de IVA, 20% de IVA adicional (a cuenta de cuando se venda), un variable de ganancias entre 3 y 11%, ingresos brutos 2,5%, impuesto al lujo 35%.