Diferentes estudios científicos demostraron que el esmalte semipermanente es uno de los tratamientos estéticos más peligrosos para la salud. Esto se debe a que las lámparas utilizadas para este procedimiento emiten rayos UV, lo que favor la aparición de cáncer de piel a lo largo de los años.
Es común que algunos tratamientos de estética generen ciertas molestias o incomodidades, ya que muchas personas recurren a todo tipo de procedimientos. No obstante, cuando se trata de prácticas que podrían estar relacionadas con el riesgo de desarrollar cáncer, el tema adquiere una relevancia mayor.
Conoce los peligros de hacerse el esmalte semipermanente y evita el uso recurrente de las lámparas ultravioletas. Los expertos recomiendan mantener las uñas naturales, sin químicos de por medio.
Casos de cáncer de piel por usar esmalte semipermanente
Hace poco más de un año, en Argentina se conoció la historia de una joven de 26 años diagnosticada con cáncer de piel en uno de sus dedos. Su médico, Damián Ferrario, explicó que se trataba de un carcinoma espinocelular in situ, un tumor localizado en la zona de la uña.
Las principales sospechas sobre el origen de la lesión se centraron en la exposición acumulada a los rayos UV de las lámparas utilizadas para el secado del esmaltado semipermanente y el kapping. Lo cierto es que la joven afectada contó que se hizo este procedimiento durante dos años y medio, cada quince días durante sin interrupciones.
Matías Maskin, jefe del servicio de dermatología del Centro de Educación Médica e Investigaciones Clínicas, consideró excesiva esa frecuencia, señalando que hacerlo cada 14 días es una exageración. El especialista sugiere a sus pacientes evitar este tipo de esmaltado o reservarlo solo para ocasiones puntuales.
¿Es dañino el esmalte semipermanente para las uñas?
Un estudio publicado en la revista Nature en enero de 2023, realizado por Maria Zhivagui, Areebah Hoda, Noelia Valenzuela y otros investigadores, reveló que la radiación emitida por los secadores de uñas puede dañar el ADN y producir mutaciones que favorecen el desarrollo de cáncer.
Para comprobarlo, los científicos analizaron células expuestas a la luz de estas lámparas. Los resultados mostraron que, en los modelos celulares evaluados, una sola sesión de 20 minutos ocasionó la muerte de entre el 20% y el 30% de las células, mientras que tres sesiones de 20 minutos consecutivos provocaron la muerte de entre el 65% y el 70% de las células.
Matías Maskin advirtió que, dado que aún no existen personas con más de cinco años de exposición continua a estos tratamientos estéticos, es probable que los casos actuales sean solo un anticipo de lo que se observará a futuro en relación con el cáncer de piel asociado a la exposición prolongada a estas lámparas.