Pese al mayor estrés que enfrenta el crédito al consumo, las Sociedades Financieras Populares (Sofipos) lograron contener el deterioro de su cartera al cierre de 2025, de acuerdo con el Reporte de Estabilidad Financiera de diciembre de 2025 del Banco de México (Banxico), que descarta riesgos sistémicos asociados a estas entidades.
El banco central detalla que durante el periodo analizado el financiamiento no bancario se desaceleró, particularmente entre los intermediarios regulados, mientras que el crédito otorgado por entidades no reguladas registró una contracción.
En ese entorno, el desempeño de las Sofipos destacó por la estabilidad de su cartera, aun cuando concentran buena parte del crédito al consumo dirigido a hogares.
“La morosidad de este sector y el Infonacot, en su conjunto, aumentó ligeramente desde el último Reporte, aunque la de Sofipos y Socaps se mantuvo relativamente estable”, señaló Banxico en el documento.
El informe ubica este comportamiento en un contexto de mayor presión financiera sobre los hogares, derivada de un menor dinamismo económico y de condiciones financieras más restrictivas, factores que han impactado con mayor fuerza a otros intermediarios financieros no bancarios.
Banxico advierte que, aunque algunos intermediarios presentan indicadores que sugieren vulnerabilidades, la participación de estas entidades en los activos totales del sistema financiero es reducida, y la exposición de la banca a este segmento es limitada. En ese grupo, las Sofipos no muestran señales de deterioro que comprometan su operación.
Sin riesgo sistémico, pero bajo vigilancia
El reporte es claro en que, por su tamaño y nivel de interconexión, las Sofipos no representan un riesgo sistémico para el sistema financiero mexicano, aunque forman parte del conjunto de intermediarios no bancarios que requieren seguimiento cercano ante posibles cambios en el entorno macroeconómico.
“En conjunto, los indicadores sugieren que el sistema financiero mexicano continúa estable y resiliente”, destacó el banco central, al tiempo que reconoce que persisten riesgos asociados al comportamiento del crédito y a la situación financiera de los hogares.
Así, en un escenario de menor crecimiento y mayor cautela en el otorgamiento de financiamiento, las Sofipos se mantienen como un segmento que ha logrado navegar la desaceleración sin un deterioro visible en su cartera, un dato clave dada su relevancia en el crédito al consumo y la inclusión financiera.