

En Europa, un diminuto estado se ha ganado la fama de ser el paraíso definitivo de los millonarios. Sin embargo, esta imagen de lujo y exclusividad enfrenta ahora un problema que ni el dinero ha podido resolver: la falta de espacio físico para seguir creciendo.
En este escenario, ni siquiera un millón de dólares garantiza una vivienda digna en términos de tamaño, lo que ha llevado a soluciones tan extremas como construir sobre el mar.
Mónaco enfrenta el dilema del lujo sin espacio
En Europa, donde la mayoría de los países tienen amplias extensiones territoriales, Mónaco, tierra de magnates, representa una excepción que ya tocó su límite. Rodeado por el mar Mediterráneo y las montañas, el país simplemente no tiene más tierra disponible.

Las autoridades, conscientes del reto, han optado por expandirse hacia el mar con proyectos como Portier Cove -también conocido como Mareterra-, una plataforma artificial que agregará seis hectáreas de suelo urbano.
Este tipo de expansión busca mantener la competitividad del mercado inmobiliario sin alterar la infraestructura actual. No obstante, cada nuevo proyecto implica desafíos técnicos y costos altísimos. A menudo, construir algo nuevo significa demoler algo viejo, lo cual encarece aún más el valor del suelo urbano y eleva la exclusividad a niveles extremos.
Mónaco: el país donde los millonarios abundan
Según el informe La Nueva Riqueza Mundial 2025 elaborado por la consultora Knight Frank, aproximadamente el 35% de la población de Mónaco posee una fortuna que supera el millón de dólares.

Este porcentaje convierte al principado en el territorio con la mayor densidad de millonarios por habitante a nivel global. No es casualidad: su política fiscal, que exime del pago de impuestos sobre la renta, el patrimonio y, en la mayoría de los casos, sobre herencias, ha sido un imán para las grandes fortunas desde 1869.
Pero no solo se trata de dinero. La seguridad, la estabilidad política y el estilo de vida mediterráneo han hecho de Mónaco un destino permanente para quienes buscan algo más que un refugio fiscal. En apenas 2.02 km², el país concentra a miles de personas con patrimonios millonarios que buscan aprovechar sus beneficios sin comprometer su calidad de vida.
Con un millón de dólares, solo se compran 17 m² en Mónaco
En cualquier otro país, una suma de un millón de dólares permitiría adquirir una residencia de lujo, incluso con vista al mar. En Mónaco, en cambio, esa misma cantidad apenas alcanza para 17 metros cuadrados, según documentó el youtuber argentino José Álvarez Torres.

Esta cifra refleja no solo la escasez de espacio, sino también el valor desorbitado del metro cuadrado, que en algunas zonas supera los 100 mil dólares.
La presión sobre el mercado ha generado un nuevo modelo urbano, donde la remodelación de propiedades existentes es tan frecuente como necesaria. Mientras tanto, los proyectos sobre el mar han pasado de ser una rareza a convertirse en una necesidad. Para los millonarios que no encuentran lugar en tierra firme, vivir sobre el agua es la nueva frontera del lujo en Mónaco.













