

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presionó hoy a funcionarios de la Unión Europea para que actúen rápida y decisivamente para resolver su crisis de deuda, que la Casa Blanca dice estaba pesando en la economía estadounidense.
Obama se comunica de manera regular con la canciller alemana, Angela Merkel, con el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y otros líderes europeos mientras las preocupaciones por la deuda se ampliaron en Grecia, Italia y España, dañando los mercados de acciones y sembrando dudas acerca del crecimiento y las exportaciones de Estados Unidos.
La reunión de hoy con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso -en una cumbre anual entre líderes de Washington y Bruselas- le dio la oportunidad a Obama de redoblar la presión sobre los funcionarios europeos para actuar decisivamente para evitar un mayor contagio.
El secretario del Tesoro Estadounidense, Timothy Geithner, y consejeros de la Casa Blanca tomaron parte en la reunión a puertas cerradas. No incluyó a Merkel, Sarkozy y a otros jefes de estado europeos que necesitan tomar duras decisiones para salvar la zona euro.
“El presidente reflexionará en sus conversaciones de la reunión de hoy (...) que Europa necesita tomar acción definitiva, concluyente, para manejar este problema, y que tiene la capacidad para hacerlo”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
“Los eventos en Europa obviamente tienen un impacto en nuestra economía. Creó un viento en contra por mucho de este año (...) y continúa creando ese viento en contra”, agregó.
Van Rompuy y Barroso ejercen influencia como jefes de instituciones clave de la UE en el corazón de los esfuerzos para enfrentar la crisis, que ha sembrado dudas sobre el futuro del bloque común de 17 naciones en un momento de debilidad para la economía global.
Obama previamente ha dicho que calmar a los mercados requeriría “algunas duras decisiones” en Europa, pero no ha entrado en detalles. Algunos en Washington creen que el Banco Central Europeo podría ser más activo en la crisis, aunque es un punto de vista impopular al otro lado del Atlántico.
Evitar el contagio de la crisis europea es vital para Obama, cuyas perspectivas de reelección dependen de su habilidad de blindar la economía de Estados Unidos de otro derrumbe y de bajar la tasa de desempleo de un 9%.
A pesar de la crisis en Europa, las exportaciones de Estados Unidos a la Unión Europea se mantuvieron fuertes en los primeros nueve meses de este año, con un alza de alrededor de 15% respecto al mismo periodo el año pasado, de acuerdo a cifras de Estados Unidos divulgadas este mes.













