Chile comenzará a debatir una nueva constitución nacional para reemplazar la heredada del régimen dictatorial de Augusto Pinochet, tras que hoy una abrumadora mayoría de votantes impusiera el "Apruebo" al cambio de la carta magna, en un plebiscito que transcurrió sin mayores inconvenientes según las autoridades electorales del país trasandino.

Escrutadas más del 80% de las mesas, el Servio Electoral de Chile informó que el sí al cambio de la Constitución recoge un 78,28% de los sufragios, contra el 21,72% que optó por el rechazo a la modificación.

El "Apruebo" obtuvo 5.877.648 votos, mientras la opción "Rechazo" lograba 1.631.217 en una elección que tuvo mayor nivel de participación que la media en el país desde que el voto es voluntario.

El presidente Sebastián Piñera, acompañado de todo su gabinete, reconoció en rueda de prensa en el Palacio de La Moneda el triunfo del "Apruebo" y de la Convención Constitucional (que se conformará en un 100% por ciudadanos electos para este propósito con composición paritaria entre hombres y mujeres) para redactar la nueva Constitución.

"Hoy los chilenos y chilenas han expresado libremente su voluntad a través de las urnas, eligiendo la opción de una Convención Constituyente, por primera vez con plena igualdad entre hombres y mujeres, para acordar una Nueva Constitución para Chile", dijo el presidente.

Ya hay festejos en todo Chile entre los partidarios del cambio, que coparon la Plaza Italia, en Santiago, epicentro de las manifestaciones populares que jalonaron el proceso que desembocó en el referendo.

La nueva carta magna será redactada por una Convención Constituyente formada por 155 ciudadanos que serán elegidos el próximo 11 de abril. Deberá tener paridad de género y cuota para pueblos originarios.

El proceso electoral de hoy es una derivación del estallido social del 18-O del año pasado, que expuso el profundo descontento de una gran parte de la población chilena en puntos esenciales como el alto costo del sistema de transporte, de la salud y de la educación, y el sistema previsional, entre otras cuestiones.

La nueva Constitución deberá pasar por un nuevo plebiscito ratificatorio, en el que los chilenos deberán aprobar o rechazar este nuevo texto, que se espera se realice en 2022 y con esto el país podrá dejar atrás la Constitución de 1980.

Hoy domingo unos 14,8 millones de chilenos tuvieron que votar sobre dos cuestiones: si aprueban o rechazan una Nueva Constitución; y cuál será el tipo de órgano que redacte el documento, ya sea una Convención Mixta Constitucional (integrada 50% y 50% por miembros elegidos popularmente y legisladores en funciones) o Convención Constitucional (integrada solamente por miembros elegidos popularmente).

En relación al segundo tema a decidir, la opción por una "Convención Mixta Constitucional" obtiene el 20,79% de los votos, mientras que la Convención Constitucional obtiene el 79,21%.