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Ante la disyuntiva de qué regalarle a los niños el 21 de agosto, quizás lo primero que uno piensa es regalarles juguetes. A pesar de esto, de tantas publicidades que vemos en los medios, muchas veces no se sabe exactamente cuál de todos los modelos es el que se desea o qué aspectos se deben tener presentes a la hora de elegir uno.
La licenciada Laura Lezaeta, psicóloga infantil y cocreadora de JuegoLogía (@juegologia), recomienda alternativas didácticas que eduquen a comunicar sus emociones:
"En ellos desarrollan los vínculos familiares, impulsan la creatividad, ejercitan su motricidad fina y el lenguaje, entre otras cosas", subrayó en su cuenta oficial de Instagram.
Ideas para regalar este día del niño
Cuentos infantiles
Suele encantarles a todas las edades y resulta beneficioso para los niños, ya que a través de las historias de los personajes, van desarrollando habilidades lingüísticas, emocionales y sociales.
Al tener en cuenta esta alternativa es importante saber elegir cuál es el más adecuado según la etapa evolutiva en la cual se encuentra.
Juguetes didácticos
Pueden encontrarse en el mercado un sinfín de juguetes con un agregado didáctico que se obtienen por un estudio y análisis previo, según la edad apropiada y que deja como resultado un impuso en el desarrollo de diferentes habilidades:
lenguaje
motricidad fina
educación emocional
creatividad
artísticas
entre muchas otras
Elementos artísticos
Ideales para que ellos puedan crear sus propias producciones artísticas y puedan compartirlas en familia, los elementos artísticos pueden desarrollar la emocionalidad, y expresión a la hora de comunicar. Entre estos regalos pueden hacerse cajas con diversos materiales como:
- témperas
marcadores
hojas
afiches de muchos colores
masas
entre muchos otros
Instrumentos
Otra excelente idea son los instrumentos musicales para niños o juguetes para armar, al igual que micrófonos o parlantes si les gusta cantar. Todo aquello que los invite a desarrollar y dejar volar la imaginación a través de la música será bienvenido.
Encontrar esa "veta artística" ayuda no solo a que disfruten el momento, sino a que no se aburran al poco tiempo. Esto además alimenta la exploración a largo plazo.