Es común preguntarse en algún punto de la vida: ¿Cuándo una persona es considerada vieja? Pero nuevas investigaciones sugieren que la respuesta no es tan simple ni tan cronológica. De hecho, la vejez parece ser más una construcción social que una etapa biológica claramente delimitada.
Según Eric Verdin, presidente del Buck Institute for Research on Aging, no existe un punto de inflexión biológico definido que marque la transición hacia la vejez. "El envejecimiento es un continuo", explica, "y varía enormemente entre individuos".
No hay una respuesta única. Tradicionalmente, la jubilación (entre los 60 y 65 años) fue el umbral simbólico de la vejez en muchas sociedades. Pero hoy sabemos que esa frontera es más difusa de lo que parece y está más cerca de los 70 años y 80 años.
¿Por qué la edad cronológica ya no es una medida fiable?
La edad cronológica, los años que viviste, fueron tradicionalmente usada para marcar etapas de la vida. Pero hoy, muchos expertos proponen centrarse más en la edad biológica, es decir, en cómo envejecen realmente tus células y tejidos.
Esto cambia el paradigma. Dos personas pueden tener la misma edad en años, pero estados físicos y mentales completamente distintos. Este enfoque empezó a transformar cómo entendemos la vejez, y cuándo comienza realmente.
¿Qué edad tiene una persona "vieja" en la actualidad?
Un estudio reciente liderado por Markus Wettstein, de la Universidad Humboldt de Berlín, revela que la percepción de la vejez cambio en las últimas décadas. Hoy en día, los adultos mayores se sienten más jóvenes que las generaciones pasadas a su misma edad.
Esto se debe, en parte, al aumento de la esperanza de vida, pero también a una resistencia cultural a aceptar el envejecimiento. "La gente pospone la vejez porque no quiere verse en una etapa que considera indeseable", señalan los investigadores.
¿Cómo influye la cultura en cómo envejecemos?
La forma en que percibimos la vejez varía según la cultura. En Occidente, donde se valora la juventud, la vejez suele asociarse con decadencia. Pero en culturas orientales, como en China o Corea, el envejecimiento se considera un signo de sabiduría y respeto.
Becca Levy, profesora en Yale y experta en psicología del envejecimiento, demostró que tener creencias negativas sobre la edad puede llevar a una peor salud física y mental. Por el contrario, una visión positiva del envejecimiento puede mejorar tanto la calidad como la duración de vida.
¿Qué papel juega la medicina en retrasar el envejecimiento?
En las últimas décadas, la ciencia avanzó mucho en entender el envejecimiento. Desde terapias celulares hasta el ayuno intermitente, las intervenciones para ralentizar el deterioro del cuerpo están cada vez más desarrolladas.
Sin embargo, aún no existe un único marcador que indique cuándo alguien entra oficialmente en la tercera edad. Algunos biomarcadores como los niveles de lípidos, el daño en el ADN o la capacidad física se estudian como posibles indicadores, pero no hay consenso.
¿Qué nos enseñan los "superancianos"?
Algunas personas no solo viven más, sino que lo hacen con salud y lucidez mental bien entrados los 70, 80 e incluso 90 años. Estos "superagers" capturaron el interés de los científicos porque podrían tener claves genéticas o de estilo de vida que expliquen su envejecimiento exitoso.
Comprender qué los hace diferentes podría ayudar a extender la "esperanza de vida saludable" del resto de la población, es decir, los años vividos sin enfermedades crónicas o discapacidades significativas.