

Luego de una fuerte devaluación del dólar oficial en diciembre, el Gobierno busca sostener la estrategia de corregir el tipo de cambio de un 2% cada mes, con el objetivo de mantener la competitividad en relación a la inflación.
Sin embargo, luego de que el INDEC registrará un 25,5% del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en diciembre 2023 y que, según las consultoras privadas, este número se mantenga en enero, "la posibilidad de sostener el crawling peg del tipo de cambio se ve limitada".
Así lo informaron desde la Fundación Capital (FC), al considerar que vendrá "un próximo trimestre de alta inflación". En este marco, detalló cuáles serán los tres escenarios posibles para el dólar y el incremento de los precios durante el 2024.
¿Qué pasará con el dólar y la inflación en 2024?
El centro de análisis económico de Argentina y América Latina evaluó qué podría ocurrir con el tipo de cambio oficial y cómo la decisión del Gobierno se verá limitada según la tendencia que mantenga la inflación.
El dólar con una inflación moderada
Según el escrito, una de las posibilidades es que el IPC se ubique en 21,1% en enero y se reduzca a 10% en febrero, 7% en marzo y un 6% en abril. Ese sería uno de los escenarios más favorables para la pelea contra la inflación.
De darse de esta manera, el 2% de ajuste mensual permitiría "mantener cierto colchón de competitividad hacia los meses de abril y mayo", dado que todavía estaría un 31% por encima del de noviembre 2023. No obstante, sostuvieron que "un crawling peg mayor luce necesario para evitar una constante merma de competitividad hacia delante".
El dólar con una inflación media
Por otra parte, la Fundación Capital consideró que la inflación podría atravesar "una dinámica más compleja". En estos casos, llegaría a 21,1% en enero, 18% en febrero, 15% en marzo y recién un 10% en abril.
Frente a este contexto "más desafiante", remarcan que "el actual esquema de deslizamiento cambiario resulta poco sostenible, entrando en conflicto hacia el comienzo de la cosecha gruesa".
En el informe destacan que el tipo de cambio oficial en mayo perdería prácticamente toda la competitividadque se obtuvo con la devaluación. "En este caso, las dudas sobre la salida del esquema actual se acentuarían y daría lugar a la especulación sobre un nuevo salto cambiario", especificaron.
El dólar con una inflación alta
Por último, se prevé un tercer escenario en donde se mantenga una alta inflación en los próximos meses (alrededor de los 25,5% o superior) y que alcance un porcentaje interanual de un 400%.
"Acá la pérdida de competitividad es aún más vertiginosa, perdiéndose completamente la ganancia de la devaluación ya en marzo. En este caso, el deslizamiento cambiario del 2% mensual tendría una corta trayectoria por delante", argumentaron.
En este marco, ni la inflación ni la brecha cambiaria se moderan y de mantenerse el crawling peg establecido por el Gobierno, "obligaría al BCRA a un salto cambiario en julio/agosto que vuelve a escalar la tasa de inflación".













