En 2023, hasta la asunción de Javier Milei, el financiamiento del Banco Central al Tesoro fue de $10,5 billones, explicado por compras en el secundario y ejercicio de puts por $ 7,3 billones, giros de adelantos y utilidades por $ 1,7 billones y emisión neta de letras intransferibles por $ 1,5 billones, ya que no hubo hasta el cambio de mandato recompras de deuda del Tesoro de títulos en manos del Central, según releva un informe de la consultora 1816.
Pero desde la asunción de Milei hasta el 1° de febrero pasado inclusive, el financiamiento del BCRA al Tesoro fue negativo en $ 1,5 billones, explicado por compras en el secundario y ejercicio de puts por $ 2,6 billones, giros nulos de adelantos y utilidades, emisión neta de letras intransferibles por $ 1,3 billones y, compensando todo eso, recompras de deuda al BCRA por $ 5,4 billones.
BCRA y el Tesoro
Si bien la nueva meta de financiamiento BCRA es muchísimo más genuina que la anterior, el Central, vía distintas normativas a través de las que impulsa que los bancos compren soberanos a expensas de pases (cambiando títulos BCRA por títulos del Tesoro), puede generar también expansión monetaria vinculada a las necesidades fiscales (toda vez que una reducción en los pases implica un aumento de la base monetaria).
Esos mecanismos son los permisos a los bancos de encajar títulos soberanos, a la promesa de estimular el mercado secundario de bonos y a la oferta de puts, entre otras normas.
Déficit cero
"En cualquier caso, mientras se cumpla el objetivo de déficit primario nulo -razona 1816-, el Tesoro no debiera requerir financiamiento neto de ningún tipo, ni del BCRA ni de los bancos, de modo que todo financiamiento adicional provisto por el sistema financiero debiera también ir a capitalizar el Central".
Desde la asunción de Milei hasta el 1° de febrero pasado inclusive, el financiamiento del BCRA al Tesoro fue negativo en $ 1,5 billones, explicado por compras en el secundario y ejercicio de puts por $ 2,6 billones, giros nulos de adelantos y utilidades, emisión neta de letras intransferibles por $ 1,3 billones y, compensando todo eso, recompras de deuda al BCRA por $ 5,4 billones.
En base a los números emitidos de puts, calcularon que los bancos explicaron al menos el 77% de lo adjudicado en cada una de las cuatro licitaciones del Tesoro de la era Milei, más del doble de lo que habían explicado en las últimas cuatro licitaciones de la era de Alberto Fernández. Hoy el mercado de soberanos en pesos está totalmente dominado por los bancos.
Staff report del FMI
El hecho relevante en este sentido no sólo es el Staff Report del FMI, que confirmó que la meta de financiamiento del BCRA al Tesoro en 2024 será nula, sino la novedad es la letra chica.
Ahora ese financiamiento se medirá teniendo en cuenta no sólo los giros de adelantos y utilidades, sino también otros cuatro conceptos: las letras intransferibles, las compras del BCRA de títulos en pesos en el mercado secundario, los ejercicios de puts y, neteando todo eso, las recompras del Tesoro de soberanos en manos del Central.
Intervenciones
"Esto, indudablemente, volverá más genuina la meta de financiamiento del BCRA, que en 2022 y 2023 se 'salteaba' con las intervenciones del Central en el secundario. Para los analistas, la 'contra' de esta nueva meta es que es mucho más difícil de monitorear diariamente, considerando que la información pública sobre las compras del BCRA en el secundario y sobre los ejercicios de puts es limitada".
"Sólo se pueden hacer estimaciones teniendo en cuenta los montos operados a los niveles bid del BCRA y teniendo en cuenta el factor "Otros" de variación de base monetaria neteado de conceptos que también aparecen en esa línea, como los cambios en los stocks de Lediv y Bopreal y el market to market del BCRA en futuros", concluye el paper.