Mientras los gigantes de Silicon Valley reescriben las reglas del juego con resultados por encima de las estimaciones y apuestas descomunales en inteligencia artificial, los inversores argentinos encuentran en los Cedear de Meta y Microsoft una puerta directa a ese nuevo ciclo de crecimiento global. En un escenario donde el mercado premia tanto la rentabilidad como la visión de largo plazo, las dos firmas que presentaron balances este miércoles se consolidaron como los grandes protagonistas del rally tecnológico de 2025. En la plaza local, el Cedear de META se dispara más de 15%, mientras que el de Microsoft, sube casi cinco por ciento. Ambas compañías no solo superaron con holgura las expectativas de Wall Street, sino que también revelaron una estrategia agresiva de inversión en inteligencia artificial (IA) que podría redibujar el mapa de poder del sector. Las acciones de Meta suben un 12% y las de Microsoft avanzan un 5% en Wall Street tras la publicación de sus resultados trimestrales. En el caso de la firma fundada por Bill Gates, la reacción del mercado le permitió cruzar por primera vez el umbral de los u$s4 billones de capitalización bursátil, un hito que hasta ahora solo había alcanzado Nvidia, la joya del boom de los semiconductores. Pero el dato más revelador no estuvo únicamente en la mejora de los ingresos y beneficios -que en ambas empresas crecieron a doble dígito-, sino en el volumen y el ritmo de inversión en infraestructura de IA, un segmento que dejó de ser promesa para transformarse en columna vertebral de la estrategia corporativa. Damián Vlassich, Team Leader de Estrategias de Inversión en IOL, señaló sobre el balance de Microsoft que, la compañía cerró su cuarto trimestre fiscal con resultados por encima de lo esperado, impulsados por un crecimiento robusto en todas sus líneas de negocio, en especial en Intelligent Cloud y Productivity and Business Processes. "La compañía reportó ingresos por u$s 76440 millones, lo que representa un crecimiento del 18% interanual, el más alto en más de tres años", aseguró el estratega. La utilidad neta fue de u$s 27230 millones, con un BPA de u$s 3,65 y superó cómodamente las previsiones de los analistas., agregó Sobre META, Vlassich destacó que reportó resultados muy sólidos y también superó con holgura las expectativas del mercado en ingresos y utilidades. La compañía generó ingresos por u$s 47520 millones, lo que representa un crecimiento interanual del 22%, impulsado principalmente por la expansión del negocio publicitario y el aumento de usuarios activos. La utilidad neta alcanzó los u$s 18337 millones, con un beneficio por acción (BPA) de u$s 7,14, "significativamente por encima del consenso de analistas", concluyó. Meta anunció que sus gastos de capital para 2025 se ubicarán entre u$s 66000 y u$s 72000 millones, y ajustó al alza su estimación previa. Microsoft, por su parte, proyecta más de 30000 millones en Capital Expenditures, o gastos de capital en español (capex) y arrendamientos financieros solo en el primer trimestre de su ejercicio fiscal, muy por encima de los u$s 24.230 millones anticipados por el consenso. Este gasto tiene un claro destinatario: la expansión de centros de datos y el entrenamiento de modelos de IA de nueva generación. En paralelo, Meta confirmó una inversión de u$s 14300 millones en Scale AI, una startup de etiquetado de datos clave para el desarrollo de modelos fundacionales, y el lanzamiento de su flamante división Meta Superintelligence Labs, que apunta a competir con líderes como OpenAI y Anthropic. La magnitud de estas apuestas no pasó desapercibida entre los analistas. Un informe de Citi advierte que el nuevo ciclo de capex podría beneficiar directamente a fabricantes de chips como AMD y Broadcom, que mantienen una exposición significativa a las compras de ambas tecnológicas. "Creemos que AVGO y AMD serán los principales beneficiarios del incremento en la inversión de Microsoft y Meta", escribieron los analistas, señalando que Microsoft representa cerca del 8% de las ventas de AMD, mientras que Meta explica el 2% de los ingresos de Broadcom. Aun cuando la mayoría de las firmas de análisis aplaudieron la solidez de los resultados y reafirmaron recomendaciones positivas -como Barclays, que reiteró su visión "overweight" sobre Microsoft-, algunos inversores empiezan a preguntarse si el vértigo de gasto en IA puede convertirse en una debilidad estratégica a futuro. Morgan Stanley, por ejemplo, reconoció la robustez del negocio principal de Meta -que en el segundo trimestre registró ingresos por u$s 47.520 millones, con un crecimiento interanual del 22% y utilidades netas por u$s 18.340 millones (+36%)-, pero también advirtió sobre la "ligereza" con la que Zuckerberg parece estar desplegando recursos. "Por un lado, el negocio principal es tan fuerte que financia por completo las nuevas apuestas. Pero por otro, la manera en que Zuckerberg reparte el dinero genera cierta inquietud, sobre todo si el equipo de superinteligencia no entrega resultados concretos", alertó el banco. El momentum del mercado no muestra signos de agotamiento, y estas cifras consolidan a Meta y Microsoft como líderes indiscutidos del nuevo paradigma tecnológico, donde la escala, el talento en IA y la capacidad de ejecución marcan la diferencia. La pregunta, de aquí en adelante, será si la carrera por dominar la inteligencia artificial puede mantenerse rentable, o si eventualmente obligará a un ajuste en las valoraciones que hoy parecen inquebrantables. Por ahora, Wall Street parece haber elegido una respuesta clara: los gigantes tecnológicos todavía tienen margen para correr.