Renault anunció que está reduciendo la producción en Corea del Sur; y Opel, una unidad de General Motors, detendrá parte de su actividad industrial en España y Alemania la próxima semana debido a la falta de autopartes provenientes de Japón.

Estos dos casos de falta de insumos se encuentran entre los primeros que informan las compañías industriales fuera de Japón. Las automotrices manejan complejas cadenas de abastecimiento y, con la crisis nuclear provocada por el terremoto y tsunami en Sengai, se ven afectadas por la interrupción en los envíos de componentes.

Renault aseguró que su unidad Samsung Motors surcoreana postergará las horas extras planificadas desde el 19 de marzo hasta la siguiente semana en su planta ubicada en Busan.

La fábrica importa componentes desde Japón, incluyendo un motor de seis cilindros para su sedán SM7 de Samsung y transmisiones para toda su línea de vehículos. Debido a la falta de componentes, producirá entre 3.000 y 4.000 autos menos por mes en la planta donde normalmente se fabrican 20.000.

Renault aclaró que ninguna otra planta de Samsung se verá afectada en el corto plazo. La mayoría de los componentes provenientes de Japón se transportan en barco, por lo que la compañía tiene entre cuatro y seis semanas para encontrar una fuente alternativa de abastecimiento.

En Europa, la unidad de Opel de GM señaló que su fábrica en Zaragoza, España, suspenderá la producción el 21 de marzo, debido a que le falta un componente electrónico proveniente de Japón. Su planta en Eisenach, Alemania, cerrará el lunes y martes por la misma razón. La automotriz produce su modelo Corsa en ambas plantas y la Meriva en Zaragoza.