El pueblo costero de A Guarda, en Galicia, se ha ganado fama por servir una de las langostas más deliciosas de la región. Situado junto a la frontera con Portugal, este enclave marinero presume de una larga tradición ligada al mar y de una cocina que prioriza los productos frescos del Atlántico.

Su gran cita gastronómica es la Festa da Langosta e da Cociña Mariñeira, un evento que cada año convoca a miles de visitantes atraídos por la posibilidad de degustar uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía gallega.

El pueblo de la provincia de Pontevedra, se perfila como uno de los puntos clave del turismo culinario gallego gracias a su reconocida langosta y sus paisajes costeros.

El pueblo de Galicia que celebra la langosta como emblema gastronómico

A Guarda se ha consolidado como uno de los referentes gastronómicos de Galicia gracias a la calidad de su marisco, especialmente la langosta. Cada mes de julio se organiza la Festa da Langosta, una celebración declarada de Interés Turístico de Galicia.

Esta fiesta ofrece platos tradicionales preparados con langosta fresca capturada en aguas del Atlántico por pescadores del propio municipio.

Los restaurantes del pueblo, muchos de ellos situados frente al mar, aprovechan esta riqueza marina para ofrecer menús especializados en mariscos, con la langosta como estrella.

Su cercanía con Portugal también influye en algunas preparaciones, aportando una fusión interesante de sabores atlánticos. Esta propuesta, junto con la belleza natural de A Guarda, ha convertido al pueblo en un destino ideal para el turismo gastronómico en la comunidad gallega.

Joya gastronómica en Galicia: este bonito pueblo costero tiene la langosta más deliciosa de toda la región.

Qué ver en A Guarda: playas, miradores y sitios históricos

A Guarda conquista por el paladar y por sus múltiples atractivos turísticos. Luego de haber disfrutado de una buena comida marinera, los visitantes pueden recorrer estos lugares recomendados:

  • Monte Santa Trega, con restos arqueológicos y vistas panorámicas del río Miño y el océano Atlántico.
  • Playas como Area Grande o Camposancos, ideales para relajarse o pasear.
  • Miradores naturales, como As Loucenzas, Capela Cruzada y el Castelo de Santa Cruz.
  • Centro histórico con arquitectura de influencia portuguesa, perfecta para una caminata tranquila.
  • Paseo en ferry hasta Portugal, una travesía corta y pintoresca sobre el río Miño.

Cómo llegar a A Guarda desde Pontevedra

Desde la ciudad de Pontevedra hasta A Guarda hay una distancia aproximada de 80 kilómetros. La ruta más directa es a través de la carretera AP-9, lo que permite completar el trayecto en alrededor de una hora en coche.

También existen opciones de transporte público, combinando tren hasta Vigo y luego autobús hasta el municipio guardés, aunque la opción más cómoda sigue siendo el vehículo particular.