

En el centro del debate político español vuelve a situarse Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, después de que el juez Juan Carlos Peinado decidiera imputarla nuevamente, esta vez por un presunto delito de malversación.
La resolución también alcanza a su asesora en el Palacio de la Moncloa, Cristina Álvarez, y ambas deberán declarar en septiembre.
El caso ha despertado un fuerte choque de posturas entre el Partido Popular y el Gobierno. Mientras desde la oposición se subraya la necesidad de respetar los fallos judiciales, desde el Ejecutivo se cuestiona la manera en que avanza la investigación.

El PP respalda al juez Peinado
La portavoz del PP en el Congreso, Ester Muñoz, defendió la labor del juez y pidió que no se pongan en duda sus decisiones. "Nosotros, como no puede ser de otra manera, respetamos las decisiones judiciales. Entendemos que el juez Peinado sabrá por qué imputa por malversación, que él no lo hace así porque sí", señaló en una entrevista con Antena 3 (EFE).
El magistrado del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid ya investigaba a Gómez por presuntos delitos de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, intrusismo y apropiación indebida.
La imputación por malversación surge tras un auto de la Audiencia Provincial de Madrid del pasado 12 de junio, que avaló la investigación en relación con gestiones en la cátedra que Gómez dirigía en la Universidad Complutense.
Indignación en el Gobierno por las imputaciones
Desde el Ejecutivo, el ministro de Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, expresó su rechazo a la decisión del magistrado. "La justicia tiene que ser igual para todos y cuando deja de ser justa no es justicia", afirmó en una entrevista en RNE recogida por EFE.
López acusó a Peinado de realizar investigaciones "prospectivas". En sus palabras: "No puede haber investigaciones prospectivas porque no se le puede investigar a usted por ser usted, buscarle distintas causas hasta que le encuentre una o la cree". Y añadió que, como "no aparece nunca nada en ningún sitio", la causa "va mutando" porque "el fin es el fin".
El ministro también apuntó que el Tribunal Supremo ya descartó la existencia de malversación y recalcó que Peinado "no tiene ni una sola prueba de nada".
Críticas al entorno de Ayuso
En el mismo marco de declaraciones, López arremetió contra el entorno de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, asegurando que mantiene una estrategia "mafiosa". Asimismo, se refirió al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, procesado junto a la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez, por un delito de revelación de secretos.
Al ser consultado por su presencia en la apertura del año judicial, el ministro fue contundente: "Produce también mucha indignación", y sostuvo que "una vez más" se intenta acabar con la figura del fiscal general pese a que "hay testimonios que demuestran que no hizo ninguna filtración".












