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La Declaración de la Renta es un trámite obligatorio para los contribuyentes en España. Cada año, la Agencia Tributaria revisa minuciosamente las declaraciones y, dependiendo de los ingresos, las retenciones y las deducciones aplicadas, el resultado puede ser a devolver o a ingresar.

Sin embargo, cometer errores en la declaración puede hacer que el contribuyente pierda la oportunidad de recuperar dinero. Desde olvidar incluir deducciones hasta errores en los datos personales, estos descuidos pueden afectar directamente el resultado de la declaración.

Uno de los errores más comunes es no verificar correctamente las retenciones aplicadas en la nómina o en las facturas. Si la empresa o clientes del contribuyente no han retenido el porcentaje adecuado del IRPF, podría resultar en una declaración cuyo resultado no sea el esperado.

En muchos casos, los contribuyentes confían en que su empresa aplica correctamente la retención, pero es recomendable revisar las nóminas del año para asegurarse de que no ha habido errores.

Además, los autónomos deben tener especial cuidado con sus facturas, ya que, si no se han aplicado bien las retenciones en los pagos recibidos, Hacienda puede considerarlo un error y no proceder con la devolución esperada.

Errores comunes en la Declaración de la Renta: olvidar aplicar deducciones y beneficios fiscales

Cada año, la Agencia Tributaria ofrece distintas deducciones y beneficios fiscales que pueden reducir la cantidad de impuestos a pagar o aumentar la devolución. Sin embargo, muchos contribuyentes olvidan aplicarlas o desconocen que tienen derecho a ellas. Entre las más comunes se encuentran:

  • Deducción por vivienda habitual (para hipotecas firmadas antes de 2013).
  • Deducción por alquiler de vivienda (en algunas comunidades autónomas).
  • Deducción por donaciones a ONGs y entidades sin ánimo de lucro.
  • Beneficios fiscales para familias numerosas o con personas dependientes a cargo.

Si no se incluyen estas deducciones en la declaración, Hacienda no las aplicará de oficio y podrías perder la oportunidad de recibir una devolución mayor.

Errores comunes en la Declaración de la Renta: datos personales o fiscales incorrectos

Introducir mal los datos personales o fiscales puede generar problemas en la declaración. Un simple error en el DNI, el número de cuenta bancaria o el estado civil puede hacer que Hacienda retrase o directamente no procese una devolución.

Otro fallo común es no actualizar correctamente la situación familiar. Si te has casado, divorciado o has tenido hijos durante el año fiscal y no lo reflejas en la declaración, podrías perder deducciones importantes o tributar de una forma menos favorable.

Errores comunes en la Declaración de la Renta: no declarar todos los ingresos

Muchas personas piensan que ciertos ingresos menores no deben declararse, pero esto puede ser un error grave. Hacienda cruza datos con empresas, bancos y otras instituciones, por lo que cualquier ingreso no declarado puede generar discrepancias que afecten tu declaración.

Algunos ingresos que a menudo se olvidan incluir son:

  • Subvenciones y ayudas públicas recibidas.
  • Ingresos por alquileres (aunque sea de manera ocasional).
  • Premios de loterías y apuestas (según el importe).
  • Ganancias obtenidas por la venta de activos (acciones, criptomonedas, etc.).

Si hay diferencias entre la información que tiene Hacienda y la que has declarado, es probable que no recibas la devolución hasta que se corrijan estos errores.

Qué hacer si se cometió un error en la Declaración de la Renta

Pequeños errores pueden provocar que la Declaración de la Renta no tenga un resultado a devolver o que la devolución se retrase. Para evitar inconvenientes, es fundamental revisar detenidamente los datos antes de enviarla, comprobar todas las deducciones aplicables y asegurarse de que no falte ninguna información fiscal.

En caso de haber presentado la declaración con errores, es posible corregirlos mediante una declaración complementaria o con la ayuda de un asesor fiscal.