Conducir implica responsabilidad y respeto por las normas. Las altas velocidades son, después del alcohol y las distracciones, una de las principales causas de accidentes graves en España, y en un periodo como el verano su impacto se multiplica en las carreteras.
Por eso, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha presentado una campaña especial de control de velocidad, que busca reducir hasta un 30% de los accidentes mortales, un objetivo ambicioso respaldado por datos alarmantes y herramientas de vigilancia avanzadas.
Por qué es tan importante controlar la velocidad
Según la DGT, en 2024 hasta el 24% de los accidentes mortales estuvieron relacionados con exceso de velocidad. Ese factor se sitúa como el tercero más frecuente en siniestros con víctimas, por detrás de otras causas como el alcohol o las distracciones.
Desde esa base, la campaña se enmarca dentro de la Operación Verano 2025, y abarca del 4 al 10 de agosto, con patrullas intensivas de la Guardia Civil y policías locales, que vigilarán tanto en vías urbanas como interurbanas. El enfoque no es sancionador sino preventivo: informar a los conductores y advertir el peligro real de excederse en velocidad.
Más radares y cinemómetros para vigilar mejor
Una de las medidas más visibles de esta campaña es la activación de 32 nuevos radares, entre fijos y de tramo, en varias comunidades: Extremadura, Castilla y León, Madrid, Andalucía, Galicia, Baleares, Asturias, Cantabria, Canarias y Comunidad Valenciana.
Además, se prevé instalar un total de 122 nuevos puntos de control de velocidad en 2025, lo que refuerza la cobertura en tramos con riesgo potencial, incluso si aún no hay estadísticas de siniestralidad, como parte de una estrategia preventiva.
Durante las primeras semanas de operación, los conductores que excedan los límites recibirán cartas informativas, sin sanción inmediata. Después, las infracciones acumuladas se traducirán en multas de hasta 600 euros y pérdida de puntos.
La DGT usará la tecnología como aliada
Desde el 6 de julio de 2024, todos los vehículos nuevos deben incluir el Asistente Inteligente de Velocidad (ISA), un sistema que adapta la velocidad recomendada en tiempo real según la vía por la que se circula. El ISA combina navegación y reconocimiento de señales para prevenir infringir los límites sin que el conductor se dé cuenta.
Los controles también contarán con cinemómetros montados en helicópteros, vigilancia aérea y patrullas móviles. Este despliegue multidimensional busca una incidencia real en la concienciación y reducción de infracciones.
Cómo pueden reducirse un 30% los accidentes mortales
Los estudios europeos indican que la velocidad está presente en hasta el 30% de los fallecimientos viales, y se estima que entre el 10% y el 15% de todos los choques se deben directamente al exceso de velocidad.
En 2024, la DGT controló más de 1,6 millones de vehículos durante campañas similares y emitió casi 94.000 denuncias. Con una cobertura más amplia y nuevas tecnologías, el impacto esperado puede ser aún mayor esta vez.
La siniestralidad en agosto de 2024 ya dejó 13 víctimas solo en los primeros días, lo que llevó a intensificar los esfuerzos en este periodo de alta movilidad.