No fue la IA: la respuesta del traductor español ante la polémica de los libros que todos quieren en la Argentina
El mes pasado surgió una polémica en la red social X donde una usuaria argentina señaló al grupo español RBA por una traducción errada de la obra literaria más famosa de Austen.
El mundo de la traducción vive una crisis sin precedentes, muchas personas creen que, por tener conocimientos en idiomas, cuentan con algún tipo de autoridad para traducir. A eso se le suma que hay múltiples páginas que potencian esta creencia mediante una nueva forma de precarizar el trabajo.
Con esto en mente, el mes pasado surgió una polémica en la red social X. Una usuaria argentina señaló al grupo español RBA por una reciente publicación editorial que hizo en el país latinoamericano.
Este grupo, conocido por la edición de libros, revistas y coleccionables, lanzó en dicho país su colección "Novelas Eternas". Está rinde homenaje a las grandes mujeres que, a lo largo de la historia literaria, han dejado huella a pluma y tinta. La edición es de tapa dura y buscan parecerse a las versiones originales de dichas historias.
El foco de esta discusión es "Orgullo y prejuicio", la novela más conocida y popular de Jane Austen. Se estima que, a lo largo de la historia, se han vendido más de 20 millones de copias, repartidas entre 1480 ediciones y todos los años se imprimen alrededor de 50.000 ejemplares.
Adiós Kindle: la mejor "biblioteca fantasma" para celebrar el día del libro totalmente gratis
Si bien esta popularidad suele acreditarse a las adaptaciones cinematográficas que se realizaron en 1940 y 2005, la realidad es que, en los últimos 100 años, este título nunca ha estado fuera del catálogo literario en habla hispana.
Después de un siglo de reimpresión constante, se debate cuál es la traducción "correcta" de esta obra. Como explica la traductora mexicana Cinthia García Soria en su blog dedicado íntegramente a la novela de Jane Austen, "una traducción puede imprimirse y reimprimirse en diferentes ediciones para distintas editoriales. También aparecen traducciones digamos refritas, basadas en traducciones previas y no en el texto original en inglés".
La polémica no es sobre que se han agotado en todas las canillitas y puestos de revistas del país sudamericano, o que el precio es irrisorio a comparación de otros libros (3000 pesos, equivalente a 2,84 euros). Para muchos usuarios de la red antes conocida como Twitter, la traducción de la historia estaba mal hecha. Incluso, apuntaron a que había sido realizada por inteligencia artificial.
Esto escaló hasta llegar a quien realizó la traducción de dicha obra literaria: Alejandro Pareja.
El traductor de "Orgullo y Prejuicio" aclara la polémica sobre el uso de IA
Pareja vive en Valdemoro, y es traductor literario profesional desde 1989. Si bien se especializa en traspasar textos del inglés al castellano, también ha trabajado con obras francesas.
Ha estado involucrado en las adaptaciones de 299 libros donde destacan obras de Frank McCourt ("Las cenizas de Ángela", "Lo es", "El profesor"), Mitch Albom ("Martes con mi viejo profesor"), Deepak Chopra, Carlos Castaneda, William Peter Blatty y otros autores modernos; y de las de obras clásicas de la literatura inglesa como "Jane Eyre", "Cumbres borrascosas", "Frankenstein", "Lord Jim", "Drácula", varios volúmenes de Sherlock Holmes, además de obras de Mark Twain, R. L. Stevenson, Jack London y William Faulkner.
El Cronista España se contactó con Alejandro Pareja, quien defendió su trabajo: "La traducción de "Orgullo y prejuicio" la realicé en el verano de 2001. No intervino más inteligencia que la mía, y tampoco se había inventado la artificial" explicó.
"Quise reflejar la impresión que produce el texto inglés original a un lector inglés moderno. El lector actual de Pride and Prejudice no recibe una versión ‘modernizada' del texto de Jane Austen. Y el lector de habla española de mi traducción ha de leerla con un poco de apertura de miras".
Esta traducción de "Orgullo y prejuicio", según indica Pareja, fue su libro número 154. "Debí de tardar un par de meses en hacerla, y estuvo aceptablemente remunerada. Después, la editorial a la que cedí los derechos (y se los renové años más tarde) ha hecho a su vez cesiones para varias editoriales".
También se intentó contactar al grupo RBA, pero no ofrecieron respuesta.
Según indica el blog de Cinthia García Soria, al revisar la historia de la publicación de esta novela en el mundo de la lengua española, se observa cómo las diferentes traducciones se alejan con el tiempo del lenguaje. En ese sentido, defiende la versión realizada por Parejo quien destaca los usos y costumbres originales de la lengua castellana.
Pese a ello, el traductor no hace oídos sordos a los comentarios de las redes sociales: "he recibido algunas críticas a palabras y expresiones que son total y absolutamente correctas y no tan antiguas (comunes en España hace pocas décadas), y he remitido a más de un lector al diccionario de la Real Academia".
"Hay quien ha llevado su atrevimiento a asegurar que uso erróneamente la palabra ‘coche' cuando debería decir ‘carruaje'. Yo he aprendido castellano clásico en los textos de Cervantes, Quevedo, Gracián, Moratín, Larra y Pérez Galdós, no en las películas ‘de época'. Abra usted un libro de cualquiera de esos autores y encontrará incontables veces la palabra ‘coche'".
A lo que concluyó: "en vez de apresurarse a asegurar que está mal la traducción, tengan un poco de prudencia y disposición a aprender, y consulten el diccionario y la gramática... y si desconfían de la gramática peninsular de la Academia española, vean la de Andrés Bello".
Esta aclaración, por momentos subida de tono, tiene sentido: muchos olvidan que "Orgullo y prejuicio" es una obra del 1813, por lo que a la hora de la traducción el lenguaje utilizado ha de ser de aquellos tiempos.