La Consejería de Medio Ambiente y Sostenibilidad ha liberado 5000 ejemplares del cangrejo de río ibérico dentro del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas (Jaén). Este crustáceo es una especie catalogada en peligro de extinción.
Este proyecto forma parte del Plan de Recuperación de Especies de Peces e Invertebrados de Medios Acuáticos Epicontinentales. Gracias a este esfuerzo institucional, la provincia de Jaén amplía su compromiso con la conservación del patrimonio natural.
De 15 a 35 poblaciones: la recuperación del cangrejo ibérico
A través de un comunicado, la delegada territorial de la Consejería, María José Lara, reveló que desde el año 2000, las poblaciones detectadas del cangrejo ibérico (Austropotamobius pallipe) han pasado de 15 a 35, lo que representa un aumento del 140 %.
Este crecimiento es resultado directo de años de trabajo conjunto entre técnicos, científicos y centros especializados como la piscifactoría del río Borosa, donde se crían anualmente unos 7000 ejemplares de esta especie para su posterior reintroducción en los entornos fluviales naturales.
"Con cada reintroducción garantizamos un futuro más prometedor para esta especie, tan emblemática como amenazada", afirmó Lara.
Cuáles son las características del cangrejo ibérico
Según el sitio Fauna Ibérica, el cangrejo ibérico tiene las siguientes características:
- Su cuerpo está dividido en cefalotórax y abdomen, cubierto por un exoesqueleto endurecido con sales de calcio.
- Posee cinco pares de patas, el primero de ellos con pinzas desarrolladas para capturar alimento.
- Cuenta con antenas largas y anténulas más cortas, esenciales para la orientación y el equilibrio.
- Su respiración se basa en branquias alojadas en cámaras laterales del cefalotórax.
- Tiene una potente aleta caudal formada por los últimos segmentos del abdomen, que le permite nadar rápidamente.
- La diferenciación sexual se observa en la forma y ubicación de sus órganos reproductores.
Las amenazas pasadas de esta especie en peligro de extinción
Durante décadas, la especie autóctona vio reducida drásticamente su población debido a la introducción de cangrejos americanos que, además de competir por el hábitat, introdujeron enfermedades como la afanomicosis, un hongo devastador para los ejemplares ibéricos.
Ahora, la situación da un giro gracias a políticas ambientales centradas en la recuperación y al apoyo institucional constante. Según la delegada Lara, el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas representa hoy "el principal bastión poblacional de esta especie en Andalucía y uno de los más importantes de toda la Península Ibérica".