Margarita Stolbizer despejó los fantasmas. Finalmente, la líder del GEN aceptó la apuesta que le dejó Hermes Binner y será precandidata presidencial en las PASO del 9 de agosto para no dejar vacante el espacio progresista y de centroizquierda del malogrado Frente Amplio UNEN. Pese a que la decisión ya fue comunicada a su tropa, la diputada esperará hasta abril para oficializar el anuncio por dos motivos: no quiere que la postulación sea sólo el resultado de la renuncia del socialista ni que esté pegada a la resolución que tomará este sábado la Convención Nacional de la UCR sobre su política de alianzas y que podría terminar en un acuerdo con Mauricio Macri, con Sergio Massa o con ambos.
Según pudo saber El Cronista, el pedido de su tropa que quedaba a la deriva sin un postulante fuerte que arrastre los cargos legislativos en la boleta y los números favorables que viene registrando en las encuestas fueron determinantes en su decisión. En su entorno se entusiasman con un sondeo en el que Stolbizer logra 11 puntos de intención de voto como presidenciable si no hay oferta radical. Y creen que si la tendencia electoral de Massa continúa a la baja podrían mejorar su posicionamiento.
Stolbizer sostiene que la desarticulación de UNEN y la renuncia de Binner dejaron un espacio progresista vacante que no se le puede regalar a la izquierda. "Entre (Carlos) Altamira y Macri y Massa no hay nada", le dice a sus íntimos. Pero la diputada también es conciente de que a esta altura del calendario electoral no se puede construir sobre la nada. "Hay un espacio vacante que hay que reconstruir. La candidatura de Margarita no puede ser un mero reemplazo de Binner, ni tampoco estar atada a lo que resuelva la UCR. Debería ser el resultado de una nueva propuesta", le dijo el lunes a El Cronista el director de la AFSCA y dirigente del GEN, Gerardo Millman. Es por eso que reclama "el apoyo indiscutido de todos los sectores y fuerzas que reclaman su postulación". La idea es trabajar sobre el programa más que explotar el personalismo de la candidata.
La legisladora confirmó su decisión a dirigentes e integrantes del GEN a través de una carta: "Me anima en esta decisión saber que no es un paso al frente en soledad, sino la certeza de que hemos constituido un equipo que avanza y asume en conjunto lo que viene", dice. Y agrega: "Somos un partido que ha madurado, ha crecido y, sin desconocer obstáculos y malos presagios, vamos a volcar lo mejor que tenemos para ofrecer lo que muchos están esperando".
De esta manera, quedó descartada la posibilidad de que Stolbizer se presente como postulante a gobernadora en la Provincia de Buenos Aires, donde una encuesta de Analogías conocida a mediados de febrero la colocaba a la cabeza de las preferencias con casi 18 puntos, por encima de Martín Insaurralde. Stolbizer venía diciendo públicamente que no quería esa candidatura, incluso cuando UNEN era una promesa alentadora. Con la declinación de Binner esa posibilidad se sepultó para siempre por no tener un candidato presidencial para pegar en su boleta.
Pese al pedido de un sector del GEN bonaerense, existe una decisión inamovible: no hay ninguna chance de que se llegue a un arreglo político con el PRO de Macri. Mucho menos aún con el renovador Massa, ni con aquellos sectores con los que "no se tengan coincidencias". Con todo, existen dirigentes que se cortan por afuera de la decisión orgánica. El jefe de Gobierno porteño anunció ayer un acuerdo electoral con el intendente del partido bonaerense de Rivadavia, Sergio Buil, quien pertenece al GEN, aunque desde esa fuerza aclararon que la decisión del jefe comunal fue "personal" y "no compromete al partido".