En el marco de la investigación por el tráfico de efedrina se descubrió que entre 2006 y 2008 se registraron llamadas desde y hacia la Casa Rosada entre funcionarios y empresarios de droguerías en los días en el que el Gobierno autorizó la importación de la sustancia.

Según publica hoy Infobae, Pedro Lucas Paradelo, un simple empleado del Registro Nacional de Precursores Químicos recibió una veintena de comunicaciones del Servicio de Comunicaciones de la Casa Militar, casi 10 llamados de otros tres abonados distintos de Presidencia de la Nación y una de la Jefatura de Gabinete de Ministros. Entre los cruces figuran llamados de ex empleadas de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) sospechadas de estar vinculadas a organizaciones de tráfico de drogas.

Este nuevo giro se da en el marco de la investigación de la jueza María Romilda Servini de Cubría, por la cual se procesó al ex titular de la Sedronar, José Ramón Granero, y a otros ex funcionarios de primera línea de esa cartera por “haber ingresado al país materias primas destinadas a la fabricación de estupefacientes, habiendo efectuado una presentación correcta ante la Aduana y alterando posteriormente su destino de uso”, según el fallo de la magistrada.

Según el portal, los llamados entre centrales oficiales, funcionarios y personas vinculadas al tráfico de efedrina aparecen de forma sospechosa, momentos antes y después de autorizaciones para importación de efedrina, una sustancia utilizada y necesaria, entre otras cosas, para la fabricación de drogas de diseño.