El Gobierno espera que el dólar cierre este 2025 en $1229, un aumento del 20,4% interanual, mientras que ubica la inflación interanual para diciembre en 22,7% y un crecimiento del PBI del 5,5% para este año, según anunció el Gobierno en el primer envío del proyecto de Presupuesto para 2026.
Sobre el valor del dólar, cabe aclarar que el precio proyectado para diciembre de este año ya fue superado y el dólar operó este jueves a $1245. Respecto del viernes pasado, la suba de la semana asciende a $40. La suba se aceleró el martes de esta semana, luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, reafirmara que no iba a haber una devaluación e ironizara: "Si a alguien le parece que está barato, agarra y compra, no te la pierdas, campeón".
El Gobierno envió una primera versión, en la que además anticipa que trabaja en un proyecto de presupuesto plurianual, en línea con lo acordado con el FMI.
Este envío se da en contexto de que hace dos años que Argentina no cuenta con un Presupuesto aprobado por el Congreso. El FMI había solicitado que el Gobierno consiguiera la aprobación del Presupuesto por parte del cuerpo Legislativo.
El Gobierno debe mandar el proyecto de Presupuesto antes del 15 de septiembre. Con este envío ratifica su voluntad de cumplir con ese mandato y evitar una prórroga.
En materia de reservas, no abunda en precisiones, y tampoco da mayores precisiones sobre las expectativas para el año próximo, pero ratifica que avanzará en la línea de ajuste fiscal, desregulaciones y apertura comercial.
La recaudación en 2026 proyectan que crecerá un 22,3% contra la esperada para 2025.
Así, esperan que la presión tributaria aumente del 22,23% del PBI en 2025 al 22,74% en 2026. El cambio respondería al "efecto neto de modificaciones en el contexto macroeconómico, así como también a medidas de política y administración tributaria".
Si bien no da precisiones sobre la prometida reforma tributaria, señala que la suba de la recaudación responderá al aumento de la actividad económica, los volúmenes de comercio exterior, la remuneración imponible y los puestos de trabajo, los precios y el tipo de cambio y de los ingresos de las ganancias de personas humanas y sociedades.
El IVA, que explica el 31% de la recaudación, aumentaría un 18,7% interanual en 2026 respecto del año en curso.
El aumento sería por la suba "del consumo en términos nominales". Sin embargo, el IVA neto de reintegros disminuiría un 0,06 puntos porcentuales contra 2025.
Los recaudado por impuesto a las Ganancias aumentará en 2026 un 23,3% interanual, lo que contra el PBI representa una suba de 0,15 puntos porcentuales, por la incidencia de "las subas proyectadas en los precios, el tipo de cambio, las remuneraciones y la importaciones".
También incide el cambio en la forma de liquidar los anticipos para las sociedades comerciales y la actualización del cálculo para las personas humanas.
Mientras que los gobernadores impulsan la discusión para modificar la distribución de los Aportes del Tesoro y el impuesto a los Combustibles, el Gobierno proyecta que los impuestos internos coparticipados aumentarán un 21,4%.
Esto respondería a la variación en las ventas nominales de los productos gravados y las importaciones.
La recaudación por Bienes Personales caería un 13% por la reducción de la alícuota y por la eliminación del régimen de percepción para la compra de divisas para atesoramiento y por los menores montos previstos en facilidades de pago.
Los impuestos a los combustibles aumentarán un 61,2% en 2026 por la actualización de la suma fija para determinar el impuesto y anticipan que continuarán con las actualizaciones de manera gradual.
Además, anticipa que no se prorroga la rebaja de las alícuotas del Decreto 38. La suba en la recaudación responderá a un aumento real de las exportaciones del 10,3%.
En lo que refiere a derechos de importación y tasa estadística, proyectan una suba del 7% contra 2025 por el aumento proyectado en las importaciones y del tipo de cambio nominal.
La recaudación en términos de PBI se verá afectada por la reducción de aranceles a la importación.
Por parte de los impuestos a los débitos y créditos, proyectan un alza del 20,2% por el aumento de las transacciones bancarias gravadas.
Las contribuciones a la seguridad social, aportes personales y contribuciones patronales crecerían un 17,9% por los aumentos esperados en los salarios nominales imponibles y "la recuperación de los puestos de trabajo".
"Los recursos de la recaudación de impuestos nacionales y contribuciones a la seguridad social se repartirán entre la Administración Nacional (que recibirá un 61,3% de la recaudación tributaria), otros entes del sector público no financiero (6,7%) y, las provincias 32,0%, vía coparticipación", explicaron.
Así, la recaudación correspondiente a la Administración Nacional será un 22,5% superior, un aumento de 0,34 puntos porcentuales del PBI. Los ingresos de origen nacional de las provincias aumentará un 21,3%, siendo el 7,27% del PBI.