Ahora que el alivio por la evolución favorable de la salud de la Presidenta va ganando a la Argentina, hay una situación institucional en uno de nuestros vecinos regionales a la que Cristina debería prestarle atención porque contiene enseñanzas útiles para sus dos años finales de mandato. Los datos son parte de una atractiva crónica del Diario Financiero de Chile, que El Cronista publica hoy en el suplemento especial de la Red Iberoamericana de Periodismo Económico.


En el artículo se analiza como el presidente chileno, Joaquín Piñera, viene creciendo en las encuestas desde que decidió asumir de modo frontal el debate sobre la actitud de la dirigencia chilena durante la dictadura pinochetista tras el golpe de 1973. Es posible que su franqueza para admitir errores aceleren la derrota que los sondeos le auguran a la derecha chilena pero la imagen de Piñera está saliendo fortalecida de la polémica.
Todo indica que la próxima presidenta volvería a ser Michelle Bachelet, una dirigente socialista que, en cambio, se retiró del poder con la imagen deteriorada hace cuatro años. Es un espejo interesante para Cristina Kirchner, quien debe acertar en los próximos meses con el camino a seguir para terminar su mandato con una mejor consideración ante la sociedad.