El economista Miguel Angel Broda habló del panorama económico post electoral y la herencia que deja el kirchnerismo. “El gran problema de la herencia es lo que ha agravado el 2015. El 2015 duplicó todos los problemas. No tenemos control sobre la política monetaria, tenemos una gran pérdida de reservas, muchos problemas de precios clave de la economía y una organización que provee estadísticas que es inconfiable”, indicó.

“El Gobierno se ha dedicado a hipotecar el futuro”, subrayó Broda, quien habló de un año complicado y puntualizó que “tenemos una herencia que es muy importante que sea explicitada el 11 de diciembre porque los problemas que vamos a tener hacia adelante no serán causados por lo que haga el próximo gobierno”.

“Tenemos una herencia muy complicada y muy diferente del relato”, indicó, al tiempo que puntualizó que lo más complejo es saber “si atacamos los problemas en forma parcial o total”. “La colocación de deuda no es sustituto de lo que, por ejemplo, el ajuste que tiene que hacer el tipo y no es sustituto de la eliminación del déficit fiscal”, aseguró.

Sobre la gobernabilidad que tendrá el próximo mandatario, el economista aseguró que “la economía” será el gran condicionante. “Se tendrá que recrear credibilidad en un programa que ataque todos los cánceres que se heredan”.

“Arreglar con los holdouts, por ejemplo, no resuelve todos nuestros problemas. Este es un problema integral que necesita de muy buenos cirujanos y no sólo de quinesiologos”, dijo. Y agregó: “la herencia es muy brava, muy perversa”.

De los posibles presidenciables, entre Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa, Broda no arriesgó sobre el equipo más capacitado a su entender. “Los equipos económicos no han llevado la discusión a nivel que uno pueda discriminar. El gran problema que tiene argentina es que va a pasar después del 10 de diciembre. El que gane tiene que poner a trabajar inmediatamente a su equipo económico”, sentenció. Y concluyó: “El gran problema es cuál será la decisión política que tomarán”.