Con la ausencia de funcionarios nacionales, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, aseguró hoy que "conmueve" a los integrantes del máximo tribunal "la postergación de los derechos de los jubilados".

"No es justo que los jubilados tengan que hacer juicios interminables", manifestó el ministro durante el acto de apertura del año judicial.

Lorenzetti, sostuvo también que "hay que hacer más simple y sencillo el reclamo de justicia".

Además, enfatizó que "no hay que tener miedo a la libertad ni miedo a quienes quieran restringirla".

El presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, sostuvo hoy que el máximo tribunal está para "respetar los derechos de los argentinos con independencia de todos los poderes".

El punto más llamativo fue la falta del Gobierno al acto de apertura del año judicial. No se presentaron ni el ministro de Justicia, Julio Alak, ni la jefa de la Procuración General, Alejandra Gils Carbó, quien en las últimas horas había dado una serie de entrevistas cuestionando el funcionamiento de la Justicia.

En ese sentido, el mensaje de Lorenzetti fue claro: "Estamos de acuerdo en que hay que cambiar la Justicia ", aunque aclaró que ese cambio -reclamado desde el oficialismo- "debe realizarse en beneficio del pueblo".

“Ya no hay pensamiento único, hay conflictos y consensos básicos y mínimos”, dijo el magistrado en otro pasaje de su discurso, y remarcó que “el conflicto tiene que existir, no hay que tenerle miedo a los conflictos”.

La ausencia de los representantes del Gobierno quedó plasmada al inicio del acto encabezado por los ministros de la Corte Suprema, que escucharon la lista de los invitados que sí estaban presentes en la salón principal del Palacio de tribunales.

Tragedias colectivas

En el marco del debate por las reformas, Lorenzetti reclamó cambios para tratar judicialmente las “tragedias colectivas”, por considerar que “las normas de procedimiento son antiguas y no están pensadas para las megacausas”.

Exigió que los tribunales se vuelvan “más accesibles”. “La Justicia va a ser más rápida cuando aceleremos los procedimientos. Cada argentino tiene en su corazón el nombre de una tragedia que se transforman en tragedias judiciales”, dijo Lorenzetti, entre las que nombró las de “Cromañón, Lapa, Río Tercero, Once, AMIA y Embajada de Israel, o los crímenes de lesa humanidad”.