La muerte de Nisman y el vaho decadente del Estado mafioso», por Fernando Gonzalez, director de El Cronista. “La Argentina se despertó ayer con la peor de las sospechas. Se despertó con la sensación de haberse convertido en un Estado mafioso. La muerte del fiscal Alberto Nisman, el abogado que había acusado a la Presidenta (...), ubica al país adolescente en uno de esos períodos de regresión institucional que se repiten a pesar de la restauración democrática”.
Nisman agrega incertidumbre a una economía donde todo apuesta a 2016», por Horacio Riggi, editor de Economía y Negocias de El Cronista. “La consternación fue tal, que ni los analistas, ni los economistas, se animaron ayer a predecir qué tipo de consecuencias, si es que las tiene, puede ocasionar en la economía argentina la muerte de Nisman. Lo que es innegable es que se trata de un hecho que suma incertidumbre a una economía golpeada“.
“Nunca voy a creer que fue un suicidio”, dijo Pilar Rahola, la española que impactó a Nisman antes de morir», por Micaela Pérez, subeditora de suplemento 3Días. “"Nunca voy a creer que ha sido un suicidio, nunca", fue el crudo texto del whatsapp que me despertó ayer a las 8 de la mañana (hora argentina, el mediodía en España). Era Pilar Rahola, la periodista española y ex vicealcaldesa de Barcelona, experta en el conflicto árabe israelí, a quien el jueves pasado había entrevistado para el suplemento 3Días de El Cronista”.
La muerte del fiscal muestra al mundo una Argentina violenta y poco confiable», por Ana Gerchenson. “El fiscal que acusó a la Presidente Cristina Kirchner de encubrir la culpabilidad de Irán en el atentado a la AMIA fue hallado muerto. El titular se repitió ayer y hoy en los principales diarios y cadenas informativas del mundo. La Argentina volvió a ser noticia”.
La presidenta, en los sumideros de la política», por Walter Curia. “Nisman no investigaba facturas apócrifas ni cuartos de hoteles vacíos en El Calafate. Descubrió a la Presidenta envuelta en una trama de complicidades para desacreditar la principal línea de investigación sobre el atentado terrorista más sangriento de la historia. Desde ayer, la Presidenta aparece mezclada en los sumideros de la política”.