El presidente Javier Milei “ha decidido no realizar el viaje previsto para presenciar sorteo del mundial de fútbol a realizarse el próximo 5 de diciembre en Washington DC”, informó en X Manuel Adorni, sin mayores explicaciones sobre los motivos.

La decisión de Javier Milei de no viajar a Washington DC modifica por completo el esquema que el Gobierno había previsto para la próxima semana.

Hasta hoy, en la Casa Rosada daban por hecho que el Presidente asistiría al sorteo de estadios del Mundial 2026 el 5 de diciembre y que, en ese marco, mantendría su primer encuentro presencial con Donald Trump desde que la Casa Blanca anunció el framework del acuerdo comercial. Ese viaje también incluía una participación en la Cámara de Comercio de Estados Unidos, señalada dentro del Gobierno como una instancia clave para avanzar en la letra chica del entendimiento.

En el Gobierno explicaban que el acuerdo todavía atravesaba una revisión técnica y que restaba definir cómo implementar los lineamientos del entendimiento. También seguía abierta la discusión para sumar al acero y al aluminio entre los productos alcanzados por la reducción arancelaria, un punto que no había sido incluido en la versión inicial del acuerdo pero que la Argentina buscaba incorporar para mejorar el paquete de beneficios.

En paralelo, la Casa Rosada ya prepara el mapa de proyectos que deberá enviar al Congreso para adecuar la normativa interna a las exigencias del acuerdo. Los cambios alcanzarán la legislación relacionada con propiedad intelectual, regulaciones sanitarias, estándares ambientales y diferentes desregulaciones que deberán alinearse con lo pactado con Estados Unidos. Desde la oposición reiteraban que las preferencias arancelarias requieren aprobación legislativa, dado que la Constitución establece que corresponde al Congreso “legislar en materia aduanera” y “reglar el comercio con las naciones extranjeras”.

Aunque la firma del acuerdo no estaba planificada para el viaje ahora cancelado, la presencia de Milei y Trump juntos en el sorteo del Mundial había sido interpretada como un gesto político importante en medio de un proceso de negociación sensible. Con la suspensión, el Gobierno evitó precisar cuándo podría producirse finalmente el encuentro presencial entre ambos mandatarios.