Tras conseguir una caída de la inflación minorista al 1,5% en mayo -la cifra más baja en cinco años, según el INDEC- el Gobierno tiene por delante un nuevo desafío: lograr que los precios sigan controlados y evitar sobresaltos que puedan complicar el plan económico y su estrategia de cara a las elecciones legislativas de octubre.
Aunque el piso del 2% mensual ya fue atravesado gracias a la combinación de la flexibilización del cepo cambiario en abril y el nuevo esquema del dólar oficial, ahora el foco está puesto en lo que sucede en las góndolas, ya que los alimentos y bebidas tienen un peso clave en la canasta y pueden desestabilizar el índice en junio.
En ese sentido, un síntoma que enciende las alarmas es el de la inflación en el Gran Buenos Aires (GBA), que registró un incremento del 1,9% mensual en junio, de acuerdo con la Estimación de Precios Minoristas (IPC-OJF) elaborada por el Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad del Centro de Estudios de la Nueva Economía (UCEMA).
En términos interanuales, la suba fue del 37,9%, mientras que la inflación núcleo -que excluye precios regulados y estacionales- avanzó un 2,1% mensual, con una variación del 34,0% anual.
Este dato implicaría una nueva suba contra el 1,5% del mes pasado, ya que algunos rubros continúan presionando con fuerza sobre el índice general. No obstante, la variación resultaría marginal, de 0,4 puntos porcentuales más que no deberían alterar el ritmo de desaceleración del IPC para los próximos meses.
En lo que va del año, la inflación acumulada alcanza el 15,1%, mientras que la núcleo suma un 14,2%.
Qué rubros aumentaron más en junio
Según el informe de OJF, los sectores que más aumentaron el mes pasado fueron:
- Educación: +3,4% mensual
- Bienes varios: +3,3%
- Alimentos y bebidas: +2,6%
- Transporte y comunicaciones: +2,5%
- Esparcimiento: +1,9%
Estos incrementos explican buena parte de la suba mensual, con los alimentos una vez más en el centro de las preocupaciones, ya que tienen un impacto directo sobre el consumo cotidiano de los hogares.
Por otra parte, los precios regulados (como tarifas de servicios públicos o transporte) subieron 2,8% mensual, mientras que los bienes y servicios estacionales mostraron una baja del 1,6%, lo que contribuyó a contener la variación general del índice.
Qué es el IPC-OJF y cómo se mide
El IPC-OJF (GBA) se basa en el relevamiento diario de más de 15.000 precios de bienes y servicios en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
El mismo utiliza ponderadores similares a los del INDEC y permite obtener estimaciones adelantadas de la evolución de los precios minoristas.
Qué esperar para el segundo semestre
Aunque la inflación viene mostrando una tendencia a la baja, los analistas advierten que factores como el descongelamiento de tarifas, la evolución del tipo de cambio y las expectativas económicas y políticas podrían provocar nuevas presiones sobre los precios en los próximos meses.
Además, se anticipa una posible reactivación del consumo que podría impactar en algunos rubros sensibles.