El ministro de Economía, Martín Guzmán, le dio la bienvenida a la misión técnica del FMI no solamente endilgándole responsabilidad primaria en la actual crisis, por haber desembolsado a la Argentina u$s 44.000 millones del último stand-by. También Guzmán reveló que una interna en el organismo podría permitir una renegociación del acuerdo comprensiva de la perspectiva del Gobierno.
Ayer comenzó la tarea de la misión del FMI encabezada por el encargado del caso argentino, el venezolano Luis Cubeddu, y la adjunta de la dirección del departamento Hemisferio Occidental, Julie Kozack, quienes en primera instancia, y durante una semana, recopilarán datos acerca de la marcha de la economía y detalles del plan de reestructuración que propone la Argentina. Se verán con analistas, Economía y el BCRA.
Pero Guzmán planteó, junto con la voluntad de pagar la deuda de la Argentina, que el préstamo del FMI se tomó "en una situación y condiciones insostenibles y sirvió para financiar la fuga de capitales".
"El FMI es responsable por la crisis económica que se está viviendo hoy, es importante tener memoria", subrayó.
Dijo que el cambio de conducción en el Fondo, cuando la búlgara Kristalina Georgieva reemplazó a Christine Lagarde, "en un momento en que la cuestión estaba bien caliente", fue alentador para entender el proceso. "Se viene trabajando, y hay un creciente entendimiento mutuo", expresó.
En el contexto de la línea argumental de la necesidad de garantizar la sostenibilidad fiscal para el pago y para el despliegue de la economía, también indicó Guzmán que ahora "parte de las discusiones son sobre las premisas del programa actual, que deben reemplazar a las premisas anteriores. Ese entendimiento semana a semana ha ido mejorando", dijo Guzmán.
"Se está trabajando en estos detalles; ellos tienen sus propios análisis de sostenabilidad, tiene diversos análisis", indicó el ministro.