La ministra de Industria, Débora Giorgi, admitió que existen “problemas puntuales” en el sector industrial, aunque negó que haya una situación de cierre de empresas y despidos.
Además, defendió la ley de Abastecimiento rechazada por las principales entidades empresarias al afirmar que “se necesitan ciertas acciones del Estado” para neutralizar “”la posición dominante de algunas compañías”.
"Hoy no podemos hablar de que la industria argentina está despidiendo, aunque puede haber problemas puntuales”, reconoció Giorgi quien afirmó que “de ninguna manera” se observa una situación de cierre de empresas en la Argentina.
La ministra destacó "los máximos históricos" registrado en el sector fabril en los años 2011 y 2012 y aceptó que, en este contexto, se observa "una desaceleración" pero enfatizó que "con tasas muy inferiores a las que tienen nuestros socios comerciales".
Aseveró que "existen todas las herramientas para que este proceso de industrialización siga en el marco de un mundo complicado y un mercado interno pujante".
En cuanto al paquete de leyes de defensa al consumidor, en el que figura la reforma a la ley de Abastecimiento rechazada por las principales entidades empresarias, Giorgi en una entrevista concedida al diario Tiempo Argentino justificó que las normas sancionadas la semana pasada en el Congreso "protejen a las economías regionales y le quita discrecionalidad a las leyes que estaban vigentes".
Respecto a la situación del sector automotriz, Giorgi evaluó que "la Argentina es una industria que tuvo problemas por decisiones mal tomadas de las terminales automotrices".
"Tiene una excesiva concentración en el mercado, donde más del 80 por ciento de lo que exportan va a Brasil, y de lo que producen, más del 60 por ciento lo exportan. Es una situación cíclica lamentable que trato de sostener", explicó.
Asimismo, criticó que en las terminales "existe una perspectiva permanentemente equivocada sobre cual va a ser el tipo de cambio y sobre eso toman determinadas acciones de cobertura que los perjudica".