A las puertas de un nuevo año electoral, mientras casi todos los argentinos mechan sus habituales preocupaciones -inflación, inseguridad- con el Mundial, algunos dirigentes no desvían la atención de sus armados políticos. Más allá de la disputa mayor, que permite el ingreso a la Casa Rosada, muchos están enfocados en sus armados locales. Juntos por el Cambio no es la excepción cuando se mira la Provincia de Buenos Aires.
En el conurbano bonaerense viven unas12 millones de personas. Además de su importancia para las elecciones nacionales, está mucho en juego a nivel municipal. Juntos por el Cambio, la principal coalición opositora, aspira a mejorar sus resultados electorales de 2019 para administrar más municipios.
El plan, está claro, sería mantener los actuales, reconquistar los que se perdieron hace tres años y arribar por primera vez a otros. Hay también un cuarto grupo de municipios: aquellos en los que la victoria parece una quimera, pero se aspira a hacer una buena elección para sumar concejales y aportar para las cuentas provincial y nacional.
Consolidar lo propio
Tanto en el PRO como en la UCR existe una alta expectativa por lo que pueda pasar. Los malos números del gobierno nacional generan esperanza de hacer la mejor elección desde que se conformó Cambiemos. En este escenario, los municipios que actualmente se administran son el primer objetivo: se trata de Tres de Febrero, San Isidro, Vicente López, San Miguel y Lanús.
En cuanto a los nombres propios para pelear por esas intendencias, los escenarios son diversos. Diego Valenzuelapodría aspirar a un cargo provincial; pero, en principio, es el mejor instalado y se espera que vaya por su tercer mandato en el municipio en pos de brindar la mejor oferta electoral.
Gustavo Posse, si bien ha mostrado apetito por cargos provinciales, podría ir por su séptimo mandato consecutivo. Si decide no hacerlo, la candidata elegida sería su hija Macarena. De esa forma se continuaría la línea sucesoria, ya que Melchor Posse, padre de Gustavo, fue intendente desde 1983 hasta 1999.
Soledad Martínez -sucedió a Jorge Macri- y Jaime Méndez -del riñón de Joaquín de la Torre- aspiran a continuar como jefes comunales de Vicente López y San Miguel, respectivamente. En el caso de Lanús sí habría un cambio: está decidido que Néstor Grindetti -también con aspiraciones provinciales- deje el lugar como candidato a su mano derecha, Diego Kravetz -secretario de Seguridad del distrito y pareja de Soledad Acuña-.
recuperar lo perdido
En el segundo grupo aparecen los municipios que Juntos por el Cambio aspira a reconquistar, como Quilmes, Morón y Pilar. En los dos primeros casos, las figuras más instaladas son justamente los exintendentes Martiniano Molina y Ramiro Tagliaferro. Si ellos deciden lanzarse para desbancar a Mayra Mendoza y Lucas Ghi parece complicado que les hagan una interna, aunque dependerá de los armados nacionales.
Por ejemplo, si se realiza una interna entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, ambos pueden llevar sus propios candidatos a intendentes. Por eso se replica la dinámica en varios distritos: nombres propios que se acercan a la ex ministra de Seguridad para tener una posibilidad de esa manera.
En Pilar, en cambio, el exintendente Nicolás Ducoté, en medio de algunos problemas judiciales, no sería el número puesto. Quien aspira a pelearle a Federico Achával sería el exfutbolista Sebastián 'El Dandy' Neuspiller.
Luego, hay algunos municipios en los que Juntos por el Cambio está "expectante", por distintos motivos. Victoria en las legislativas de 2021, conflictos internos del Frente de Todos, candidatos instalados. Un caso es el de Tigre: el año pasado, la boleta encabezada por Segundo Cernadas se impuso al Frente de Todos en el histórico reducto massista. El actor sería el número puesto para candidatearse por encima de Nicolás Massot, concejal del distrito y exdiputado cercano a Emilio Monzó.
aPROVECHAR LAS INTERNAS del FdT
En Hurlingham, las tensiones entre Juan Zabaleta y La Cámpora generaron que el intendente regresara al municipio luego de ser ministro de Desarrollo Social de la Nación. El candidato opositor, en principio, sería Lucas Delfino, como en 2021. Actualmente está a cargo del ente de turismo de la ciudad de Buenos Aires. Durante el gobierno de Cambiemos fue subsecretario de Asuntos Municipales, dentro de la órbita de Rogelio Frigerio.
Otro distrito con tensiones en el oficialismo es Esteban Echeverría. El jefe comunal, Fernando Gray, expuso sus diferencias en reiteradas ocasiones con Máximo Kirchner, en particular por la conducción del PJ bonaerense. En ese municipio de la primera sección electoral, la carta del PRO ha sido Evert Van Tooren, quien dos veces fue candidato a intendente.
Si bien tiene un alto nivel de conocimiento, Van Tooren carga también con esas candidaturas fallidas, por lo que se exploran otras alternativas. Evolución, el grupo radical referenciado en Martín Lousteau, tiene a uno de sus referentes allí. Se trata de Pablo Domenichini, rector de la Universidad Nacional Guillermo Brown y diputado provincial, ya lanzado para competir a nivel local.
El caso de Ituzaingó, en principio, parece complejo: desde que se separó de Morón y se creó el municipio, en 1995, solo una persona ocupó el cargo de intendente, Alberto Descalzo. Sin embargo, en las últimas legislativas se impuso la fórmula de Juntos, encabezada por el concejal del PRO Gastón di Castelnuovo, quien aparece como la figura con mejor proyección de cara al año que viene.
Todavía no está claro si tendrá que enfrentar a Alberto o a Pablo Descalzo, hijo del intendente, quien suena desde hace varios turnos electorales como posible sucesor.
Alguna victoria de Juntos por el Cambio en cualquiera de los otros municipios aparecería como una sorpresa. Sin embargo, se apuesta por hacer la mejor elección posible para contribuir a los resultados provincial y nacional. No es lo mismo perder por una diferencia exigua que por una muy amplia.
Por eso, varios candidatos recorren desde hace años sus distritos y algunos destacan del resto. Como David Zencich, al frente del PRO de Merlo; o Pablo Alaniz, en Florencio Varela. En La Matanza, el municipio más poblado del país, fue candidato en 2019 Alejandro Finocchiaro, ex ministro de Educación durante el gobierno de Mauricio Macri.
Por último, quien también hace campaña en el distrito es Josefina Mendoza: la dirigente radical fue la diputada nacional más joven de la historia en 2017 y podría aspirar a competir en un territorio que suele ser adverso a la oposición.