El papa Francisco reveló hoy en Filadelfia, Estados Unidos, que se reunió fuera de agenda con víctimas de abusos sexuales a menores de edad y advirtió ante obispos estadounidenses que "todos" los clérigos acusados “deben rendir cuentas”.

El pontífice dijo sentir abrumado por “la vergüenza” ante el hecho de que los sacerdotes que debían cuidar a niños hayan perpetrado el delito de pederastia y expresó: “Lo lamento profundamente, Dios llora". "Los pecados de abuso sexuales a menores no pueden ser mantenidos en silencio por más tiempo. Me comprometo a la celosa vigilancia de la Iglesia para proteger a los menores y que todos los responsables rendirán cuenta", sostuvo. Francisco se reunió con los obispos de Estados Unidos en el Seminario San Carlos Borromeo de Filadelfia, donde comenzó su discurso en español informando que se había reunido previamente con víctimas de abusos sexuales perpetrado por clérigos.

"Acabo de reunirme con un grupo de personas abusadas de niños que son ayudadas y acompañadas aquí en Filadelfia con un especial cariño por el arzobispo monseñor (Charles) Chaput y nos pareció que tenía que comunicar esto a ustedes", dijo. “Llevo grabado en mi corazón las historias, los sufrimientos de los menores que fueron abusados sexualmente por sacerdotes y siento mucha vergüenza por las personas que tenían a su cargo el cuidado de estas tiernas criaturas”, agregó.

Francisco afirmó que “los supervivientes de abusos se han convertido en verdaderos heraldos de esperanza, y ministros de misericordia. Le debemos a ellos y sus familias nuestra gratitud por su valor de hacer brillar la luz de Cristo sobre el mal del abuso de menores”.

El Papa volvió a condenar el delito pederastia en Estados Unidos, donde numerosos clérigos fueron acusados por perpetrar abusos sexuales contra menores de edad y las diócesis debieron afrontar juicios millonarios que las llevaron a la quiebra.

El miércoles, en la catedral San Mateo de Washington, Francisco destacó el "empeño generoso" de la Iglesia por "curar a las víctimas" de pederastia, pero instó a los obispos a "seguir trabajando para que esos crímenes no se repitan nunca más".

El Papa habló también del tema de los abusos el jueves en la catedral de San Patricio de Nueva York, donde dijo que es consciente del sufrimiento que debieron padecer “a causa de la vergüenza provocada por tantos hermanos que han herido y escandalizado a la Iglesia en sus hijos más indefensos”.

"Los acompaño en este tiempo de dolor y dificultad, así como agradezco a Dios el servicio que realizan acompañando al Pueblo de Dios”, destacó dirigiéndose a los obispos.