El empresario ultrakirchnerista Cristóbal López habría pagado un soborno por u$s 10 millones para destrabar la compra de la refinería San Lorenzo a la petrolera estatal de Brasil Petrobras, según reveló la revista brasileña

Época

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El medio gráfico perteneciente a la red O Globo se basó en documentos privados y en las declaraciones de varios partícipes en la presunta operatoria ilegal para detallar cómo sucedió la siniestra operación.

Fue João Augusto Henriques, un operador del partido político PMDB ( ex aliado del oficialista PT), quien en su rol de lobista admitió su participación en la cobranza de “propinas” en distintos contratos de Petrobras. Uno de ellos, por los activos argentinos de la petrolera.

Los sobornos supuestamente recibidos, según Augusto, habrían llevado siempre el mismo destino: ‘aceitar‘ a ejecutivos de Petrobras, engordar los bolsillos de políticos brasileños y financiar las campañas electorales del PMDB.

En enero de 2011, y luego de un largo proceso que incluyó una ardua discusión sobre el valor final de la venta por la inflación argentina, López cerró un acuerdo definitivo con Petrobras para la compra de su refinería en la localidad santafecina de San Lorenzo.

Por todo ese paquete, López pagó cerca de u$s 110 millones, informó entonces Petrobras, lo que le permitió acceder a un 7% del mercado local de combustibles.