La difusión del Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) la semana pasada, aunque contenía datos de agosto pasado, dejó una foto preocupante de la coyuntura económica. Mientras el EMAE cayó 1,6% en comparación con agosto de 2017, en los despachos oficiales destacaron ayer que ese mes se registró un alza de 1,3% en términos desestacionalizados, comparando con el mes anterior. En julio había pasado algo semejante, fue 1,4% en relación con junio de 2018.
El Monitor de la Economía Real, que elabora la Secretaría de Transformación Productiva, que fue divulgado ayer resalta estos datos, y algunos otros positivos, como el no haberse detenido la creación de empleo registrado (0,3% en julio) pese al freno de la actividad económica o que el turismo creció creció 10% interanual en el primer semestre de 2018, siendo "el complejo exportador más dinámico". También crecieron 28% las exportaciones a Brasil en el tercer trimestre.
Pero una mirada más amplia permite ver también que la industria manufacturera se contrajo 5,6% en agosto, debido a la sequía y a la menor demanda en el mercado interno.
Esto es el resultado de sectores que registran una consistente caída desde comienzos de año, como la industria textil (8% de caída desde enero y 13% sólo en julio), molienda (11% de baja en el año y 14% en julio), agroquímicos (22% menos en el año y 27% en julio), o metalmecánica, que tuvo una caída de 1% entre enero y julio pero con un desplome de 12% sólo en el séptimo mes del año.
Algunos otros sectores, como cemento, venían bien en la primera parte de 2018 por el crecimiento de la construcción (5% en enero-julio) pero registraron caída de 5% el último mes, o bebidas (1% más en el año y 2% de baja en julio). Las sectores estrella son automotriz (9% de crecimiento en agosto), acero crudo (16% en julio) y carnes rojas (12% en julio).