

En los últimos meses, la mezcla de cáscara de limón licuada con bicarbonato de sodio se convirtió en tendencia en redes sociales en Colombia y otros países.
Videos y publicaciones aseguran que esta preparación ayuda a limpiar el organismo y prevenir enfermedades, pero los médicos advierten que la evidencia científica es limitada y que un uso excesivo puede ser riesgoso.
¿Para qué se usa la mezcla de limón y bicarbonato?
De acuerdo con los defensores de este remedio casero, la combinación tendría propiedades antioxidantes, ayudaría a reducir la acidez estomacal y podría contribuir a la higiene bucal.
La cáscara de limón contiene compuestos como flavonoides y aceites esenciales, mientras que el bicarbonato es un conocido antiácido de venta libre.

En plataformas como TikTok y Facebook, los usuarios sugieren tomar la mezcla en ayunas o después de comidas copiosas, lo que ha potenciado su popularidad. Sin embargo, estas recomendaciones no provienen de guías médicas oficiales.
¿Qué dicen las fuentes médicas?
MedlinePlus (NIH)indica que el bicarbonato de sodio puede usarse como antiácido para la acidez ocasional, pero no debe tomarse por más de 2 semanas sin indicación profesional. Un consumo excesivo puede causar alcalosis metabólica, un trastorno grave que altera el equilibrio ácido-base del organismo, además de interactuar con medicamentos como antihipertensivos y diuréticos.
En cuanto a la cáscara de limón, revisiones científicas señalan que contiene antioxidantes y aceites esenciales con potencial efecto beneficioso, pero no existen estudios clínicos que avalen que al mezclarla con bicarbonato se obtengan beneficios preventivos o terapéuticos.
¿Cuáles son los riesgos de consumirlo sin control?
El bicarbonato de sodio en dosis altas puede provocar alcalosis metabólica, un trastorno grave que altera el pH de la sangre, según Medline. También puede interactuar con medicamentos como los antihipertensivos o diuréticos. En cuanto a la cáscara de limón, si no está bien lavada, puede contener restos de pesticidas.

Los especialistas recomiendan limitar este tipo de preparaciones a usos ocasionales y, en caso de síntomas persistentes de acidez o problemas digestivos, consultar siempre a un médico.
Una moda que divide opiniones
Aunque la mezcla de cáscara de limón y bicarbonato gana espacio en redes, los expertos coinciden en que se trata más de una moda viral que de un tratamiento comprobado. Como cualquier remedio casero, puede tener efectos puntuales, pero nunca debe reemplazar la atención médica profesional.
El auge de estas prácticas deja una conclusión clara: la popularidad en redes sociales no equivale a eficacia científica.











